El Príncipe de Asturias ha advertido este miércoles de que la superación de los desafíos a los que se enfrenta en la actualidad Europa se logrará «teniendo en cuenta el marco de interdependencia» entre los distintos Estados miembros y «huyendo de actitudes insolidarias que, a la postre, se traducen en resultados estériles e incluso contraproducentes».
Así se ha expresado en la clausura del VII foro hispano alemán, un encuentro que celebran las sociedades civiles de ambos países para avanzar en el conocimiento mutuo y que en esta ocasión ha abordado la imagen que España y Alemania proyectan y que se ha visto inevitablemente influida por la crisis en los últimos tiempos.
Ante representantes de la Embajada alemana en Madrid y la presidenta de la Fundación Bertelsmann,Liz Mohn, Don Felipe ha subrayado que «en estos tiempos difíciles son muchos los ciudadanos que están asumiendo duros sacrificios, con la esperanza de que las reformas emprendidas contribuyan a garantizar la sostenibilidad de nuestro modelo social».
Frente a esta situación, ha abogado por el «impulso» de la cooperación bilateral entre España y Alemania para identificar formas de abordar los retos nacionales y europeos.
El Heredero de la Corona ha aprovechado para hacer una defensa del modelo de progreso europeo, «que combina protección social con una economía de libre mercado altamente competitiva» y que ha llamado a «preservar y fortalecer».
La innovación empresarial y la generación de empleo, ha destacado, es hoy por hoy un «debate central» en muchos países de Europa, donde se precisa, en su opinión, de «un esfuerzo intenso e imaginativo en el ámbito de la formación que sirva para mejorar las posibilidades de empleo de los jóvenes» que en países como España sufren una alta tasa de paro.
En su discurso, el Príncipe se ha referido a la importancia de que España y Alemania profundicen en un mejor conocimiento de sus realidades, que «tantas veces» se ven «distorsionadas por estereotipos y prejuicios» que dificultan la comprensión mutua.
Don Felipe ha saludado la pujanza de la relación bilateral con Alemania en muchos campos, como el económico y el comercial, con unas exportaciones españolas que han crecido un 50 por ciento en los últimos 10 años
