San Jorge quemó al dragón con todo Cáceres de testigo

Un año más, todo Cáceres se echó a la calle y llenó la plaza Mayor para apoyar a San Jorge, su patrón, en la lucha contra el dragón, derrotarle y quemarle ante la alegría de los ciduadanos que aplaudían la hazaña.

Todo Cáceres se echó a la calle para revivir la historia de la reconquista de Cáceres por las tropas del rey Alfonso IX. En esta ocasión, el ayuntamiento, mediante concurso público, aprobó la gestión de la organziación del evento  a la empresa BB Imagen, que ha sido la encargada de que miles de cacereños y visitantes hayan vivido una noche mágica, con una excelente temperatura, mejor ambiente, llena de leyenda, música con lso ärboles Muetos y varios dj’s y los consabidos e imprescindibles fuegos artificiales.

Así, dede la Avenida de la Bondad hasta la Plaza Mayor, partió el cortejo, cuyo protagonista principal el dragón, iba acompañado de una manada de perros alaskanos, bandas de moros y cristianos, bailarinas moras , echa fuegos con zancos y el propio San Jorge con sus soldados.

Al llegar a la Plaza Mayor, en medio de una gran algarabía de público, se narró la leyenda, aprovechando la belleza de las piedras de las torres, del recurso del Arco de la Estrella, de la explanada de la ciudadela, para que la triste princesa Mansaborá recobrare la alegría por el amor de su capitán, y además se produjera la derrota del dragón por la acción de San Jorge, que acabó quemándolo ante el alborozo de miles de ciudadanos que acompañaron la recreación de la leyenda y siguieron con el disfrute de la noche y de la fiesta con la música en la propia Plaza Mayor.

SÍNTESIS DE LA LEYENDA

El día 23 de abril se celebra el patrón de Cáceres, San Jorge. Es la fiesta del fuego, del dragón y de la lucha de moros y cristianos, esta fiesta rememora un hecho acaecido en el siglo XIII. Cuenta la leyenda que el 22 de abril de 1.229, víspera del señor San Jorge, Alfonso IX lucha por someter Cáceres para la cristiandad, valiéndose de los amores entre una bella muchacha mora, Mansaborá, hija del caíd que dominaba la ciudad y un capitán cristiano, San Jorge, que  consigue introducirse dentro del recinto amurallado y sorprender a los defensores moros. Aquel 23 de abril, Cáceres es definitivamente reconquistada y dotada de los fueros por el rey leonés Alfonso IX. Desde ese momento el santo es patrón de la ciudad.

Los festejos cambian todos los años pero lo que no puede faltar es el desfile de moros y cristianos y la posterior representación de las luchas entre los dos bandos, con la quema, al final de la batalla, de una representación del dragón y un castillo de fuegos artificiales.

Tradicionalmente, algo que ya está en desuso, en los diferentes barrios de la ciudad, se prende fuego a las hogueras organizadas por la juventud, como legado de una tradición cuando, en la noche de San Juan, los caleros cacereños quemaban sus cacharros viejos y organizaban batallas de brevas.Pero esto ya es historia de la propia ciudad, que debería revitalizarse por ejemplo, a través de las asociaciones de vecinos.

Imágenes: Julián Paniagua.+