La Princesa Letizia brilló como nadie en la alfombra azul a la entrada a la Iglesia Nueva de Ámsterdam, para asistir a la investidura como reyes de Máxima y Guillermo de Holanda, con un vestido impresionante firmado por Felipe Varela.
En el
día más importante, en el que ya por fin la pareja se convirtieron en Reyes, la
Princesa de Asturias confió en el corte habitual de sus vestidos. El color
elegido fue gris con bolso a juego y manga larga con encajes por todo el
diseño.
Con un
vestido impresionante firmado, otra vez, por Felipe Varela en seda y tul
titanio, bordado con microperlas de acero y cristal. Doña Letizia lució un
magnífico tocado disco con pétalos de organza y plumas al tono de María Nieto.
Doña
Letizia, con un maquillaje muy natural, completó el look con unas sandalias y
pochette en ante de hematite de Magrit y una única condecoración, la Gran Cruz
de Carlos III. María Nieto fue la creadora de los tocados de la familia de la
Princesa de Asturias, el día de su boda con el Príncipe Felipe.