El 90% del alumnado participante en las inmersiones lingüísticas considera muy buena su experiencia

El noventa por ciento de los alumnos que ha participado en el programa estival de inmersiones lingüísticas, ha considerado “muy buena o excelente” la utilidad del curso a nivel académico y lingüístico.

También el noventa de ese alumnado que realizó su inmersión en Jarandilla
de la Vera ha valorado como “muy bueno o excelente” el grado de aprovechamiento
individual de este curso.

Así lo ha indicado en Zafra el secretario general de Educación, César Díez
Solís, donde ha culmunado la primera de las estancias que se celebran en esta
localidad y en la que han participado 33 alumnos de primero de Bachillerato. De
ahí que Díez Solís haya asegurado que desde el Gobierno de Extremadura “vamos a
proseguir con la política de fomento del plurilingüismo”.

Zafra ha sido una de las sedes seleccionadas por la Consejería de Educación
y Cultura para desarrollar este programa que se aprobó en el Consejo de
Gobierno Extraordinario celebrado en Cáceres en septiembre de 2012. Realizando
las inmersiones lingüísticas en la comunidad autónoma “hemos triplicado el
número de alumnos que participan”, ha indicado Díez Solís, pues además de
“rentabilizar los recursos educativos, ponemos en valor el patrimonio cultural
y natural de nuestra región”.

En este sentido, la alcaldesa de Zafra, Gloria Pons ha agradecido a la
Consejería de Educación y Cultura el hecho de contar con su ciudad para llevar
a cabo esta iniciativa. “Para Zafra, ser una de las sedes formativas es muy
importante y para nosotros ha sido un valor añadido”.

Además de Zafra, donde tras este primer curso el próximo domingo llegarán
otros 33 alumnos para realizar su inmersión lingüística en inglés, este
programa también se ha desarrollado en Don Benito, Jarandilla de la Vera y Torrejón
el Rubio. Además, y a través de un convenio con Iberdrola, en Alcántara se
desarrolla otro curso que comparte la misma filosofía y en el que participan 40
estudiantes.

ESTANCIAS
FORMATIVAS

Tal y como ha explicado el secretario general de Educación, estas estancias
formativas “consisten en formación por la mañana y por la tarde hacen
actividades complementarias”, especificando que “en estos cursos sólo se
permite hablar en inglés”. De hecho, todo el profesorado y los monitores que
acompañan al alumnado son nativos.

El alumnado participante es de tercer y cuarto curso de ESO y de primero y
segundo de Bachillerato. El criterio de selección básico ha sido el expediente
académico, aunque después se tienen en cuenta otros parámetros como que en el
centro del alumnos no se cuente con sección bilingüe, por ejemplo, tal y como
se establece en la convocatoria.

La cuota que abona el alumnado varía en función de la renta y están fijadas
en un mínimo de 100 euros y un máximo de 200 euros. Estas inmersiones
lingüísticas, que tienen una duración de dos semanas, incluyen el alojamiento y
la pensión completa. Además de las actividades académicas, se realizan
actividades extraescolares con monitores nativos. Los grupos reducidos están
garantizados, por lo que se asegura una formación individualizada y de calidad.