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CARTA AL PRESIDENTE MONAGO DESDE MADROÑERA, por Santiago García Jiménez

OPINIÓN
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Sr. Monago, sea sincero, diga a los extremeños qué beneficios reales se han conseguido con el cierre de Urgencias de tantos pueblos ¿Ha merecido la pena?

Sr. Monago, agosto se acaba, con él los privilegios de sus
señorías, por tener posibles para vacaciones. Tengo que decirle que Madroñera
sigue con un servicio de Urgencias hasta las 22’00 h. Pregunte, si no es mucha
molestia a sus asesores, si después de esta hora hay un gran porcentaje de
enfermos que acuden a Urgencias del PAC de Trujillo procedentes de Madroñera.
Le tengo que seguir diciendo que el ahorro es cero, y este servidor le reta a
usted a explicar por qué sacrificar a un conjunto de pueblos y ciudadanos a una
sinrazón.


Le tengo que decir, una vez más, que aproveche los grandes
profesionales en sanidad que tiene a su servicio, su buen hacer está más que
probado.


Desde estas cuatro letras, le invito a reflexionar: no pasa
ná por haberse equivocado y, como decía aquel, rectificar es de sabios.


La Plataforma por la Apertura Total del Servicio de
Urgencias de Madroñera le invita a su Señoría a asistir a su asamblea, como ya
han asistido los señores Escobar y Fernández Vara, a los cuales desde aquí
damos las gracias por su comparecencia.


Sr. Monago, sea sincero, diga a los extremeños qué
beneficios reales se han conseguido con el cierre de Urgencias de tantos
pueblos ¿Ha merecido la pena?


Recordarle que en el tema del paro somos una región
importante, a nivel de renta tampoco es para tirar cohetes. Tener la nuclear
tampoco nos reporta grandes cosas y así podríamos eternizar los temas. Lo que
sí hay que reconocer a su favor es que tiene una oposición mediocre, a caballo  unos del agradecimiento y otros del
acojonamiento.


Sr. Monago, no sé cómo le voy a decir, cantando no, pues
canto mal, pero sí desde el convencimiento de estar a tiempo de dar un paso
importante y humano, de devolver la oportunidad a los enfermos y extremeños de
muchos pueblos, aún sabiendo que somos mortales, pero teniendo las Urgencias,
quizás no se pueda salvarles la vida, pero sí dar la confianza y esperanza de
vivir en los pueblos. La salud es un derecho no un privilegio.


Sr.  Monago, este
madroñero se despide de usted sabiendo que aunque no le conteste, sí que le
escucha.


Un saludo, Presidente


Santiago García Jiménez


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