El presidente de Extremadura Unida, Pedro Cañada, ha mostrado la oposición de su partido al nuevo trasvase del Tajo a la Cuenca Mediterránea por el que pasa de 350 hectómetros cúbicos a 650, lo que sería como un “doble trasvase”.
Para
Cañada es “una actuación a espaldas del pueblo con ocultación de datos y una
cierta complicidad con las ilegalidades y fraudes sobre el agua del trasvase”.
Si el agua la necesitaran para beber, ha añadido,
“podríamos repartir con ellos hasta la
última gota de agua, pero no es el caso. Hay fraude consentido”.
Además
supone dar agua a alguna Comunidad que no la necesita para beber, si no para
otras cosas como tener 17 campos de golf, y hasta tres veces más en porcentaje de
terreno cultivable de regadío, que Extremadura como donante.
El
presidente de EU ha indicado que se duplica el agua del trasvase y se dice que
hay que ser solidarios, pero se ha preguntado ¿qué ponen las Comunidades receptoras para la
solidaridad recíproca?. Estamos ante un pozo sin fondo, y desnudando a una
Comunidad para vestir a otras”.
Las
Comunidades receptoras, ha destacado, tienen una renta muy superior a las de
las donantes, que la duplican y hasta triplican.
También
se ha preguntado por qué no trasvasan el agua del Ebro, “que tiene mucho más
excedente, que tira al mar, en vez de traerla de otra cuenca con menos riqueza
y menos agua, y ya con un trasvase que ahora se duplica”.
Si
es verdad que el agua es el futuro, ha destacado, a Extremadura se le está
hipotecando su futuro.
Y
no contento el Ministro con duplicar el agua del trasvase, ha dicho Cañada, nos
recuerda que tienen otro proyecto de llevarse el agua de Valdecañas, del Tajo Medio, ya en Extremadura.
