El pasado domingo, presenciamos al desplome del PP y del PSOE en las elecciones europeas al parlamento europeo, y lo que me parece más peligroso el auge del extremismo radical de derechas y de izquierdas, ha calado entre muchos sectores de la sociedad y sobre todo en los jóvenes, un discurso muy populista, centrado en las redes sociales y en el protagonismo de su líder, en las televisiones.
La abstención de los votantes del centro-derecha y del centro-izquierda en España, sumados a la fuga del voto del PP y del PSOE a otros partidos (VOX, Ciudadanos, UPyD, PODEMOS e IU), hace un parlamento europeo, muy fragmentando y con diversas tendencias políticas.
¿Y ahora qué?, lo primero son los ciudadanos, en el Parlamento europeo, se debe y se tiene que defender una política de izquierdas, en el sentido que se ha realizado la campaña electoral, el empleo, es lo primero, es básico una reforma fiscal, una lucha sin cuartel contra el fraude y los paraísos fiscales y defender nuestros servicios públicos y sobre todos los países del sur necesitamos oxigeno, debemos pagar la deuda, pero ya hemos hecho muchísimos ajustes, necesitamos estimulo y generar riqueza para pagar la misma.
En estas elecciones europeas, los ciudadanos han trasladado un mensaje, quieren otras maneras de hacer política.
El PSOE debe y tiene que iniciar un proceso de renovación, cambiar sus estructuras, equipos y de liderazgo, necesitamos un liderazgo fuerte y que sepa transmitir nuestro mensaje, mensaje que si tenemos plasmado en la Conferencia política del pasado mes de noviembre.
El PSOE debe saber que quiere ser de mayor, un partido de centro-izquierda ó un partido escorado a la izquierda.
El PSOE es un partido de gobierno, un partido de mayorías, el PSOE no puede escorarse a la izquierda, para tener la confianza de la gente es necesario recuperar el centro-izquierda, la socialdemocracia y sobre todo volver a ser ante los ciudadanos, una marca fiable y garantizadora de las señas de identidad del PSOE: Libertad, igualdad, solidaridad… valores del centro-izquierda.
El PSOE debe de huir de distraerse en procesos internos, porque mientras hablemos de procesos internos, seguirá habiendo 6.000.000 de desempleados, una desigualdad galopante, una reducción de los servicios públicos, una fiscalidad injusta, el PSOE está el servicio de los ciudadanos.
El PSOE con sus mensajes tiene que volver a conectar con una sociedad que ha cambiado mucho, un Partido Socialista Obrero Español que conecte con las nuevas realidades de la sociedad, que le explique cuáles son nuestras propuestas, este partido tiene activos, mensajes, ideas e ilusión para sacar este país adelante como lo hizo Felipe González en los 80.
Lo que quiera ser el PSOE de mayor, lo debemos elegir todas y todos los militantes, el gran activo de este partido.
Mi profundo agradecimiento al Secretario General del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha sido un gran hombre de estado y un político que seguirá contribuyendo al PSOE, pero los tiempos y sobre todos los ciudadanos nos dicen que nuestro líder tiene que cambiar. Los dirigentes, los militantes, los simpatizantes… pasamos, pero el PSOE, seguirá estando, porque somos el partido que más ha gobernado España, hemos estado en la firma de nuestra carta magna, en los pactos de la Moncloa, en la firma de los estatutos de las CC.AA, en definitiva somos un partido con más de 135 años de historia, por eso compañeros, no por nosotros, tenemos que luchar por los ciudadanos, ellos nos están viendo, nos necesitan, luchemos por ellos y por ellas.
