El Archivo Histórico Municipal de Cáceres se suma a la celebración el próximo lunes, día 9, del Día Internacional de los Archivos con una serie de actividades que pretenden aproximar a los ciudadanos la importancia que el patrimonio documental tiene en el presente y en el pasado de los pueblos.
![[Img #36466]](upload/img/periodico/img_36466.jpg "El Archivo Histórico de Cáceres expondrá el Libro de Ordenanzas de la ciudad")
Para ello, el próximo lunes se expondrá una de las joyas medievales que posee este archivo, concretamente el Libro de Ordenanzas Medievales que se conserva como testigo de las reglamentaciones jurídicas que marcaban el devenir de las actividades comerciales en la villa de Cáceres.
Este documento se podrá ver el día 9 desde las 11,00 a las 13,00 horas, mientras que el 10 de junio en el salón de actos del Palacio de la Isla habrá, a partir de las 19,30 horas, una charla coloquio sobre los diferentes archivos históricos que conforman la red de archivos de Cáceres.
El Libro de Ordenanzas pertenece a la colección de pergaminos depositados en el Archivo Histórico Municipal de Cáceres, siendo este un ejemplar único, encuadernado en pergamino en 1562.
En él se recogen la mayor parte de las ordenanzas que se conceden a la villa de Cáceres a partir de 1477 por la reina Isabel la Católica durante su estancia en la ciudad, para la pacificación de la levantisca nobleza local.
El archivero municipal de Cáceres, Fernando Jiménez Berrocal, ha destacado que se trata de una «joya documental» y como tal es consultado por su importancia nacional e internacional.
Existen muy pocos libros de ordenanzas medievales de estas características en los archivos municipales españoles, «lo cual nos obliga a proteger y salvaguardar un libro que debido a sus especiales características forma parte del patrimonio documental español».
En total, contiene 854 páginas de papel manuscrito por ambas caras con tintas de naturaleza metaloáctidas y está encuadernado mediante pergamino flexible con enlaces de piel curtida al alumbre, fechado en 1562, cuyas características responden a la tipología de la época y cuyos nervios están constituidos por cintas que se prolongan a ambos lados del lomo para su adhesión a la cubierta.
PRESERVAR Y DIFUNDIR
Para el archivero municipal, el documento es una de los «más importantes» que existen en la ciudad, al tiempo que ha manifestado que es parte del patrimonio documental y que, por ello, hay que «preservar y difundir» ya que recoge el pasado histórico de la villa cacereña.
Por su parte, el concejal de Cultura, Jesús Bravo, ha animado a todos los cacereños a que acudan al Archivo Municipal, ubicado en el Palacio de la Isla, para que puedan apreciar con sus ojos una fuente documental de «gran riqueza».
El objetivo de esta iniciativa, ha señalado, “se basa en sacar fuera del lugar habitual estas joyas documentales para que puedan apreciar los ciudadanos un documental que recoge la vida de la villa en la época medieval».
