Todos tenemos un par de platillos que te quedan especiamente bien y que puedes presumir de ellos.Uno de ellos es la «entomatá», otro es este gazpacho de melón que me reclaman mis hijos cuando se apuntan a comer los días calurosos.
No creo que tenga mucho mérito porque un plato así tiene que quedar rico aunque no te lo propongas.
Rico y sano.
Sólo un inconveniente: Hay que consumirlo inmediatamente, dejarlo de un día para otro no es aconsejable.
Necesitamos:
2 yogures naturales tipo griego.
2 vasitos del yogur de aceite de oliva.
2 ajos.
1 Kg. de melón.
2 ó 3 pepinos.
150 ml. de nata líquida.
vinagre y sal.
Batir los yogures con el aceite hasta formar una especie de mahonesa, añadir los ajos, la sal y el vinagre y continuar batiendo. Agregar el melón y el pepino sin piel ni pepitas. Batir hasta licuarlo por completo.
Enfriar dos horas.
Antes de servir añadirle la nata o que cada comensal se la sirva en su plato.
Servir acompañado de jamón en bastoncitos, con bolitas de melón o con trocitos de manzana.
Se le puede poner un poco de miga de pan para espesarlo un poco y añadir unas hojas de hierbabuena, aunque yo lo prefiera sin ello.
Si el melón es muy dulce, aumentar la cantidad de pepino o disminuirla en caso contrario.