Seis personas que en 1902 tuvieron a bien aunar ideas y medios económicos para llevar a cabo el proyecto de este recinto en el que ahora nos encontramos. Entre ellos mi abuelo D. Juan Macías, en cuyo nombre quiero dar las gracias a quien tuvo la idea de inmortalizarlos, Antonio Moreno. Esta cerámica que se inaugura hoy en la que aparecen sus nombres, quedará para la historia de nuestra ciudad.
Es agradecer a D. Francisco Robustillo, Concejal de Asuntos Taurinos el que hiciera una Comisión para los actos y actividades de este centenario que hoy celebramos
Quiero hacer una somera enumeración de personas y entidades que de una u otra manera, después de 100 años, hicieron posible que hoy estemos aquí. Mis disculpas por los olvidos que sin duda habrá.
En primer lugar, las Escuelas Taurinas en Mérida, la primera que hubo en nuestra ciudad que fue la de Antonio Moreno, entre sus alumnos contó, entre otros, con Francisco García Galván “El Poli”, Diego Picarzo, José “El Chivé”, Juan “El Espartero, Alejo Moreno y Jorge García (hijo de Juan García El Cañi”, y posteriormente de forma personalizada a Antonio Ferrera y a Miguelín Murillo, y la de Juan García “El Cañí”, que fue mozo de espadas de Francisco Galván “El Poli”, entre sus alumnos podemos citar a Miguel Murillo, José Luis Sierra, Pedro Pablo “Hueverito”, Pedro Jiménez, José Mª Delgado, Alfonso Yuste y Rafa Cardona.
Como no recordar las alternativas de toreros extremeños como “Gallito de Zafra” en 1925, Francisco García Galván “El Poli” en 1983, único torero emeritense que tomó la alternativa aquí, y el cacereño Emilio Rey en 1989…no sobraría y sería de recibo que hoy hubiera dos placas conmemorativas de esa efemérides.
Por supuesto es de recibo citar a varias ganaderías, entre las muchas que lidiaron en Mérida, comenzando por la del día 5 de julio, la de Dª Celsa Fonfrede (Viuda de Concha y Sierra), la de los famosos AP de D. Antonio Pérez de San Fernando, la de Martínez en el 50 aniversario, la del Conde de la Corte en el 75 aniversario, la de D. Luis Albarrán y la de D. Cipriano Piriz que esta tarde lidiará aquí reses nuevamente.
¡Qué decir de los toreros que pasaron por este ruedo!, simplemente citar en nombre de los aficionados que intentaron aprender en las dos escuelas que hubo, los novilleros sin caballos y con caballos y los matadores de toros mi recuerdo y homenaje y en nombre de todos ellos quiero citar a Joselito y a Belmonte.
Ahora les toca el turno a los equipos presidenciales, en este apartado quisiera destacar al presidente D. Diego Sánchez, al asesor D. Miguel Yuste y a los veterinarios D. Álvaro Paredes, D. Domingo Alonso, Dª. Inmaculada Morales y D. Pedro Chimeno,
Por supuesto mención especial a los corraleros y alguacilillos D. Alonso y D. Diego Picarzo, a las conserjes Dª Gabina, Dª Felisa y Dª Pilar, al empresario durante 33 años D. Raúl Recuero y la gestión de la taquilla a cargo de D. Antonio Rodríguez y su hijo Nono.
Un repasillo de las Entidades Taurinas emeritenses, el Circulo Taurino de Mérida y el Club Taurino Emeritense (Antonio Moreno, Emilio Cardona, Ángel Pacheco, Antonio Díaz Saco, Saturnino Pocostales, Mamen Gil y Blas Benítez), Peña Taurina Francisco Rivera “Paquirri” (Isidro Tirado), Asociación Cultural Taurina “Cerro de San Albín” (Antonio Díaz Saco, Julio Rueda y quien les habla), la Asociación “Manuel Rodríguez, Manolete II” y por último la Asociación de Vecinos San Albín (José Antonio Moreno, Segundino, Antonio Moreno y Michel).
No me puedo olvidar de la institución municipal y el Coso del Cerro de San Albín. En este campo quiero mencionar a los alcaldes Antonio Vélez y Pedro Acedo
Para finalizar quiero mencionar a quienes nos transmitieron, en sus libros la historia de lo que sucedió en el Coso del Cerro de San Albín, D. Manuel Núñez Chamorro, D. Fernando Masedo Torres, D. Ricardo Sagardoy y por último D. José Casillas que está escribiendo actualmente un libro sobre los 100 años.
A todos ellos/as muchas, muchas, muchísimas gracias.
Ya para rematar la faena, simplemente decir que mi abuelo desde donde esté me dice con el ceño fruncido que hoy que hace 100 años desde aquello, agradeciendo el esfuerzo del Patronato de Tauromaquia de Diputación de Badajoz, tendría que haber, que menos, que una corrida de toros con el fuste, caché y tronío, en toros y toreros, que merece la conmemoración, al igual que se hizo cuando se celebraron el 50 y el 75 aniversario.