Contempopránea, la doble cita musical en Badajoz y Alburquerque

LA ALCAZABA

El pop nostálgico de Mercury Rev y el rock melódico de The Pains of Being Pure at Heart fueron los protagonistas de la doble jornada del festival Contempopránea, que se celebró, por primera vez, en la Alcazaba Árabe de Badajoz y que congregó a más de diez mil asistentes entre los dos días.

No se entiende una manta sin frío. No se entiende un Cornetto sin el regalo de chocolate del final. No se entiende un Eurovisión sin José María Iñigo y su bigote. No se entienden unos Oscar sin la presentación a un premio de Jack Nicholson. No se entiende un gol de Villa en la Selección sin la asistencia de Iniesta. No se entiende la heroicidad de Batman sin la maldad de su antítesis, Jocker.

Todos los parentescos anteriores son binomios engendrados a lo largo de la historia del arte y la cultura, así como el deporte y la televisión. No en vano, si el híbrido lo extrapoláramos a los festivales musicales, no se entendería un evento de música independiente sin uno de sus referentes más representativos, Mercury Rev.

La sobriedad que les caracteriza, unida al rock experimental y la neo psicodelia que impregnan por sus poros más ochenteros, nutren a los norteamericanos de una corriente sólida creada a mediados de los 80’s y depurada en los 90’s. Alumnos del post punk de los Sonic Youth y firmes herederos de la escuela que crearon The Flaming Lips, Mercury Rev contagió su pop noise al mundo ‘indie’, que lideraron en las islas británicas The Smiths y que consolidaron su hegemonía REM en norteamerica.

Así nació Mercury Rev y hasta la I edición del festival Contempopránea de Badajoz (XIX en total, contando las dieciocho anteriores de Alburquerque) trasmitieron su evolución en directo, tras más de dos décadas de expansión musical. Jonathan Donahue y los suyos desplegaron todo su arsenal de éxitos en el único concierto concretado, hasta la fecha, en Europa, aliciente más que suficiente para disfrutar del acontecimiento.

Antes,  The Pains of Being Pure at Heart ya había amansado a los indies con el ritmo pop shoegaze. Los pupilos más aventajados de My Bloody Valentine dominaron la situación como si de unos vetustos poperos se tratase, divirtiéndose ellos más sobre el escenario que los que copaban las primeras filas del recinto pacense. Todo un lujo el sonido de los de Brooklyn, que presentaron su último trabajo de estudio, ‘Days of Abandon’, junto a los hits de sus dos anteriores discos.

El primer día, The Horrors acaparó toda la atención de la escena alternativa. Cuatro discos avalan a los ingleses, a cada cual mejor, y que poblaron el alcazaba de su sonido post punk.

Buen escaparate, además, el festival para grupos de la región como Burgim o Happy New Year, que abrieron las jornadas de viernes y sábado, respectivamente, con rock menos convencional pero muy bailongo.

A quien no le hizo falta carta de presentación fue a Iván Ferreiro, que ofreció a sus seguidores todo el cargamento indispensable de su carrera en solitario. Lo mismo sucedió con Love of Lesbian, que actuaron por primera vez en territorio extremeño y saciaron la sed de pop español a los allí asistentes.

El Columpio Asesino y Fuel Fandango abastecieron a los más marchosos con el pop electrónico más bailongo, así como JOTAPOP DJ que, junto a otros pinchadiscos, suministraban la carga dance de los más eléctricos del festival, entre actuación y actuación.

Zombie Kids se encargó de clausurar el I festival Contempopránea de Badajoz con sus ritmos más electrónicos, basados en géneros como el electrohouse, dubstep o dance, provocando el movimiento de caderas, agitación de cuellos y brazos de los más de diez mil personas que pasaron por La alcazaba Árabe de Badajoz a lo largo de las dos jornadas. Ya lo vaticinó el director del festival, Agustín Fuentes, hace diez años: “«Con el cartel que presentamos y la reputación que tiene el festival, acudirían 15.000 personas en un recinto mayor» (cuando se celebraba en Alburquerque, con una capacidad histórica de cuatro mil asistentes).

ALBURQUERQUE Y SU ESENCIA

CONTEMPOPRÁNEA está identificado con Alburquerque, sus gentes y su propia idiosincrasia y eso se nota en cada edición. La de este año, no podía ser menos.

Es su sede clásica  de Alburquerque, que ha tenido lugar  los días 25 y 26 de julio, aunque arrancara el día 24 con una fiesta de bienvenida en la Plaza España de la localidad.

   Tras el «éxito» de Contempopránea Badajoz los pasados 6 y 7 de junio,  que reunió a más de 8.000 personas, llegó  Contempopránea en Alburquerque, donde se presentó  el disco Agent Cooper de Russian Red después de realizar una extensa gira por Asia.

   Niños Mutantes ofrecieron  su nuevo LP El Futuro, mientras que los sevillanos Pony Bravo presentaron los temas de su LP De Palmas y Cacería, y la mallorquina Maika Makovski, y después de ganar el premio Max a la mejor banda sonora por la película Forest, presentará en su actuación Thank You for The Boots.

   Kokoschca presentaron  su Lp Hay Una Luz editado en octubre del 2013, mientras que los madrileños Klein, después de haberlo editado en Japón, presentaron  su flamante trabajo titulado Beat By Beat, y los extremeños Supertennis, descubrieron  en directo su primer álbum de estudio titulado El Mono Radioactivo.

   La Habitación Roja; Exonvaldes, León Benavente o AMA han sido  otros de los grupos  que se han visto y sentido  en el festival, en el que se le ha rendido  homenaje  a Automatics, mítica banda de Jaén que revolucionaron el sonido estatal en los años 90. Cada banda versionó un tema de Automatics en directo.

Y hasta la próxima edición de Contempopránea en 2015.