Juan Carlos Barra Quintanilla mató a sus padres el diecisiete de marzo de dos mil trece de madrugada en su casa del residencial Gredos, barriada mejostilla de Cáceres, y una vez celebrado el juicio que ha durado dos días, el jurado popular lo ha considerado culpable de tal parricidio.
Ese día de marzo de 2013, Juan Carlos llegó de madrugada a casa de sus padres con los que convivía, en busca de dinero para seguir bebiendo y drogarse. Robó más de cinco mil euros y mató a sus progenitores. Se dio a la fuga y tres días después, fue detenido por la policía en Zafra, donde estaba escondido.
El parricida aunque en su día se declaró culpable, durante el juicio no ha reconocido los hechos y ha manifestado ser inocente.
Las pruebas y sus anteriores declaraciones no han hecho cambiar lo que lógicamente iba a ocurrir, que el jurado por unanimidad le considerase culpable de tal parricidio.
La fiscal y la acusación particular han solicitado treinta y ocho años de cárcel para Barra Iglesias, y la defensa, de oficio, treinta años.
El juicio ha quedado visto para la sentencia que el juez aplique ante tal veredicto del jurado.
