EL MAL TRAGO DE ELIA BLANCO

A la ex alcaldesa de Plasencia, Elia Blanco le han jodido la vida por una sentencia condenatoria de dos años y un día que deberá sufrir en prisión, acusada de fraude y prevaricación por el denominado caso Plasencia, esto es, la partición de contratos públicos en el consistorio placentino hace seis años, para ser adjudicados a un mismo constructor. Así a grosso modo, para que todo el mundo lo entienda.

Según la ley, alea jacta est, todos somos iguales ante ella y da igual la posición ciudadana, social, académica, profesional, política, que se ocupe, pero..si ello fuera cierto, quizás Elia Blanco no tendría que “ chuparse” dos años y un día en la cárcel. Por otra parte, la celeridad con la que se ha resuelto el auto de ingreso en la cárcel de la ex regidora junto al ex edil Tornero y el constructor Vega, después de seis años de litigios varios en torno al mismo caso, es cuanto menos sorprendente. Que además se haya dictado en estas fechas pre electorales también, ya que la ex alcaldesa representaba al PSOE en su cargo, en donde ha militado una buena parte de su vida. Y que en estos días, una jueza de lo Penal, muy respetable y muy magistrada ella, dicte tal resolución es muy inoportuna, aunque se dice que las resoluciones no son inoportunas sino conformes a Derecho. Hasta ahí llegamos, pero es que no ha dejado ni siquiera reaccionar a los condenados y sus abogados Todo ello y simplemente, por el daño que se le hace, no ya a una persona, es de cajón, sino  también a una formación política que es obvio que tiene mucho que callar por la sucesión de escándalos en los que se ha visto inmersa en los últimos años, pero es que las demás formaciones, y no se salva ni una, ni tampoco los sindicatos o la patronal, también. Y no vale lo del y tú más, sino la pura realidad, que se presenta incuestionable. Y a la propia sociedad, también, porque no entiende como unos casos se resuelven de tal guisa y tal prisa y otros permanecen en el limbo de los tiempos o aquellos en los que los  presuntos culpables se van de rositas.

 

Al Psoe de Extremadura le va a pasar factura el caso Plasencia, lo mismo que al PP nacional el Gürtel o las presuntas fechorías económicas últimamente sacadas a la luz de Rato, está claro, pero a seres humanos como Elia Blanco mucho más y para toda la vida, a pesar de que dejara claro  en su perfil público de Facebook el pasado mes de marzo lo siguiente :

 

“  Nunca he acordado con nadie para contratar a nadie. Jamás he tenido a la vista advertencia sobre improcedencia de pago.¿Alguien podría explicarme por qué se da crédito a la conjetura de la acusación del Partido Popular y no se tienen en cuenta las pruebas palmarias y no las dirigidas ? Y por supuesto (y esto menos mal que lo reconocen, tras habernos acusado de insolvencia punible, que ya tiene guasa) de que no nos hemos llevado ni un céntimo.”

 

Lo cierto y verdad es que Elia Blanco tiene cinco días para estar con su familia, con sus amigos, con sus compañeros, antes de pisar la cárcel de Cáceres donde estará un buen tiempo, aunque su abogado interponga recurso de reforma ante tal decisión de la jueza en cuestión.  

 

Que al menos el caso Plasencia sirva para reflexionar sobre la equidad de la Justicia, no se ha llevado un céntimo de euro, de la lentitud y enrevesamiento, muy próximo a lo torticero, de las gestiones político-administrativas, y  humanas, se le ha “ destrozado” la vida, y sociales, el ambiente que se vive en la ciudadanía con este y otros tantos casos es de repulsa, estupor, hartazgo y jamás de resignación . Es este, queramos o no, el siglo XXI que nos toca vivir.