El periodista extremeño Ángel Sastre, secuestrado en la ciudad siria de Alepo

El extremeño Ángel Sastre es uno de los tres periodistas que llevan varios días secuestrados en la zona de la ciudad siria de Alepo.

[Img #45308] Los tres secuestrados son, además de Angel Sastre, los reporteros Antonio Pampliega y José Manuel López.

 

   Las  fuentes consultadas, que no quisieron hacer muchos comentarios al tratarse de un tema muy sensible, indicaron que tenían conocimiento de la situación y que estaban trabajando sobre este asunto.

 

Los tres periodistas secuestrados están muy vinculados profesionalmente a Siria, desde donde han realizado trabajos para diversos medios. Trabajaron juntos allí ya en 2013. Antonio Pampliega es autor de Siria. Más allá de Bab Al-Salam, un libro sobre su experiencia en el país como reportero. Ángel Sastre es colaborador de diversos medios, y además de en Siria ha trabajado en diversos países de América Latina. José Manuel López es fotógrafo y ha estado en varias ocasiones en Siria casi desde los inicios de la guerra. 

 

ANGEL SASTRE

 

“Periodista de conflictos”. Así se autodefine este reportero extremeño y español, con experiencia en cubrir no solamente zonas de guerra, sino también otras realidades sociales como el narcotráfico, las adicciones, y las muertes. Para Sastre “el periodista debe dejar algo”, y aludió específicamente a la denuncia: ya sean matanzas terroristas, o falta de asistencia de un Estado.

 

“Las guerras sin periodistas son peores”, aseguró, teniendo en cuenta que hay hechos que sino tienen repercusión mediática, definitivamente “no existen”.  Son historias muy complejas las que sale a buscar, pero aclara que no es “periodista de guerra”: “Cosas malas pasan en todos lados”. Y dado el tipo de material que recopila, es inevitable hablar sobre el amarillismo y la decisión de qué dejar para que sea visto.

 

Según Sastre, los límites los pone el propio periodista, a través de la experiencia y la ética, en tiempos donde si bien hay cosas que deben contarse, hay otras que no aportan a la historia que se está relatando: a aquello que se fue a buscar. Y lo ejemplificó con los medios que publican enteros los videos de hechos como las masacres de Isis.

 

«Somos los ojos de la guerra, y podemos aspirar a despertar conciencia, pero no vamos a cambiar nada».

 

Sastre “purga sus pecados” en la cobertura de guerras, describió, y que es el único lugar donde, paradójicamente, «me siento en calma y útil».