La Comisión del Lince Ibérico aprueba la suelta de ejemplares en Valle de Matachel y busca nuevas zonas en Extremadura

La Comisión Ejecutiva del Plan de Acción del Lince Ibérico, vinculada a la iniciativa LIFE+Iberlince y reunida esta semana en Mértola (Portugal), en pleno corazón del Vale do Guadiana, ha establecido los parámetros iniciales de suelta de ejemplares durante el próximo año 2016, que incluye al Valle de Matachel, en Badajoz.

El coordinador del proyecto ‘Iberlince’ en WWF España, Ramón Pérez de Ayala, ha explicado a Europa Press que las sueltas comenzarán a mediados de enero y llegarán, como muy tarde, hasta el próximo mes de mayo, dependiendo los calendarios concretos de las gestiones de los centros con las comunidades a las que pertenecen.

Serán un total de 44 los linces que se liberarán en Portugal (Vale do Guadiana, Mértola) y en España (Valle de Matachel, en Badajoz; Montes de Toledo, en Toledo; Sierra Morena Oriental, en Ciudad Real; Guadalmellato, en Córdoba; y Guarrizas, en Jaén).

El encuentro contó con la presencia de la veintena de socios del proyecto, y en el mismo, además de analizar el estado de ejecución del programa y poner en común los resultados de las ultimas acciones realizadas, también se establecieron las pautas necesarias para la realización del informe que anualmente remite el Proyecto a la Unidad LIFE.

En septiembre, la comisión de seguimiento, principal órgano de decisión, control y seguimiento de los resultados obtenidos por este proyecto liderado como socio beneficiario por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, anunció que estudiaba «seriamente» ampliar las zonas de reintroducción de la especie en Extremadura, Castilla-La Mancha y Portugal.

Así, el director general de Gestión del Medio Natural, Javier Madrid, explicaba en declaraciones a Europa Press que las zonas siguen siendo las mismas, si bien subrayaba que «estamos poniendo sobre la mesa otras posibles zonas, porque van bien las cosas».

«Vista la experiencia de estos años estamos estudiando otras zonas tanto en Extremadura, como en Castilla-La Mancha y Portugal», manifestaba Madrid, que señala que la «clave fundamental es tener una densidad de conejos interesante, un tamaño de superficie adecuada y que no exista una vía de comunicación que pueda crear un problema a medio o largo plazo».