Desde la Plataforma de Mujeres por la Igualdad de Cáceres queremos expresar nuestro asombro al enterarnos de que la Junta de Extremadura no dará la orden de cerrar los prostíbulos, dejando expuestas al contagio y sin ningún tipo de protección a las mujeres exclavizadas en esos tugurios.
Resulta sorprendente que cuando todavía discutimos sobre la conveniencia o no de que los niños y las niñas continúen de forma presencial con sus estudios, se haya tomado la decisión de mantener los prostíbulos abiertos.
Las mujeres que padecen la prostitución en estos lugares se encuentran sometidas al riesgo de contagio sin que haya posibilidad alguna de prevenirlo, al tiempo que los focos de contagio que pudieran producirse en los prostíbulos son prácticamente imposibles de rastrear.
Las mujeres sometidas a prostitución no deberían de tener a su disposición menos recursos que el resto de la población en estos tiempos de pandemia y no hay justificación alguna para que queden abandonadas a su suerte.
Resulta contradictorio e injustificado que en una comunidad autónoma como la nuestra que presume de políticas de igualdad y contra la violencia de género se pueda, incluso en los peores momentos, ignorar las circunstancias de vulnerabilidad a que quedan expuestas las mujeres sometidas a la prostitución, en lugar de ofrecerles una salida digna a la tremenda explotación que sufren.
Las mujeres que integramos la PMPI nos declaramos abolicionistas y exigimos que se ponga fin a este»negocio» que comporta la esclavitud y el ejercicio sistemático de la violencia contra la mujer.
Plataforma de Mujeres por la Igualdad de Cáceres
