La Guardia Civil ha desvelado una operación encubierta que ha culminado con la investigación de nueve miembros de una sociedad de cazadores en Las Villuercas, acusados de formar parte de una trama de caza ilegal. Los cargos incluyen pertenencia a organización criminal, estafa, falsificación de documentos y delitos contra la flora y fauna.
La investigación se inició tras una inspección de una montería a finales del año pasado, donde se descubrió a un individuo cazando sin permiso. Documentos alterados presentados por la junta directiva de la sociedad revelaron la participación no autorizada de más de diez cazadores, algunos de los cuales habían pagado creyendo ser socios legítimos.
El análisis detallado de la documentación y la colaboración con el Servicio de Caza, Pesca y Acuicultura de la Junta de Extremadura permitieron identificar una estafa de más de 5.500 euros, entre otros delitos. Como resultado, se han instruido diligencias penales contra los implicados y se han detectado numerosas infracciones administrativas.
Este caso resalta la importancia de un control estricto en las prácticas cinegéticas para proteger el patrimonio natural y asegurar la caza sostenible y regulada. La Guardia Civil reafirma su compromiso con la protección del medio ambiente y la legalidad en las actividades cinegéticas.
