Esta iniciativa vacacional se puso en marcha por primera vez hace más de dos décadas, concebido para atender las necesidades de los niños y niñas afectados por el desastre nuclear de Chernobyl.
Superada la crisis generada por el siniestro en esta central nuclear, lejos de dar por finalizado el proyecto, ‘Ven con nosotros’ decidió seguir adelante con él ante las necesidades detectadas entre la población ucraniana, especialmente entre la infantil.
«Ahora no trabajamos en la zona de Chernobyl, pero sí detectamos en otros lugares de Ucrania problemas muy importantes relacionados con el abandono infantil, alcoholismo, familias desestructuradas, pobreza. Ahora también la guerra en Crimea. Y nuestra ONG se dedica a favorecer la vida de los niños más desfavorecidos», ha explicado a EFE Daniel Cejudo, miembro de la junta directiva de Ven con nosotros.
El objetivo que se persigue es que durante los casi tres meses que dura su estancia en España, los participantes en el programa puedan vivir una situación lo más normalizada posible «y se olviden de todos estos desastres que han sufrido», ha indicado Cejudo.
Además de recibir afecto y una atención de la que muchas veces carecen, los niños y niñas del programa aprovechan su estancia en España para realizarse un reconocimiento médico y recibir una atención sanitaria de la que con frecuencia carecen.
Por segundo año consecutivo, Aranda de Duero ha acogido la fiesta de bienvenida del contingente de niños ucranianos que pasarán el verano en tierras españolas. Castillos hinchables, gimkanas, circuitos de miniquad y talleres de malabares, entre otras actividades, se celebraron en el centro cultural El Invernadero de la capital ribereña.
