Creció en el segundo semestre del 2020, un 19,73% con respecto al mismo período del año anterior
El número de testamentos registrados se elevó concretamente en esos dos semestres de 7.356 a 8.808.
La pandemia ha tenido un impacto claro en el número de testamentos que se realizan en Extremadura ante notario. En el segundo semestre de 2019, antes del estallido de la crisis sanitaria, se realizaron en nuestra Comunidad 7.356 testamentos. En el segundo semestre del año 2020, ya con las notarías extremeñas funcionando con normalidad después de haber estado atendiendo solo los casos urgentes durante el período de confinamiento, el número de testamentos registrados se elevó hasta los 8.080. Dicho de otra forma, la pandemia incrementó en un 19,73% el número de personas que decidieron pasar por el notario para regular su sucesión, nombrado uno o más herederos, mediante acto jurídico, individual, libre y revocable.
No se trata en todo caso de una tendencia exclusiva de Extremadura sino general en toda España, donde la variación del impacto de la pandemia ha oscilado entre el incremento del 13,5% en el País Vasco al del 36,8% Castilla La Mancha.
Hacer testamento ante notario es muy sencillo. Para hacerlo solo se necesita el DNI y explicar al notario cómo se desea repartir el patrimonio. “Es evidente que la pandemia ha animado el número de testamentos en Extremadura y en toda España, pero nosotros animamos a todas las personas a que dejen regulada su sucesión con independencia de las circunstancias sociales y personales”, explica el decano de los notarios extremeños, Ignacio Ferrer, que incide en la percepción social de que solo hay que hacer testamento cuando se es muy mayor o llega la enfermedad, cuando lo mejor es precisamente anticiparse a esas circunstancias, “porque además el testamento notarial siempre se puede cambiar”.
“El testamento notarial es el más seguro, no puede perderse ni ser destruido por nadie y puede ser firmando ante el notario que desee el testador, en Extremeño cualquiera de los casi 80 notarios que aquí trabajamos”, explica Ignacio Ferrer, que añade que el notario ofrecerá a su cliente el asesoramiento necesario para adaptar sus deseos a la ley y que se haga su voluntad. “El testamento notarial es garantía no solo de legalidad, sino de secreto y confidencialidad, en cuanto a su contenido y a su propia existencia. Y, por supuesto, se puede cambiar en cualquier momento, sin que sea preciso acudir siquiera al mismo notario, con un coste de poco más de 36 euros de media”, afirma el decano. Además, a través del Portal Notarial del Ciudadano, ahora también se puede iniciar telemáticamente ante notario la preparación del testamento.
