Digital Extremadura
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La irrupción de dos rivales para la disputa de la secretaría general del PSOE en Extremadura al actual máximo líder, Guillermo Fernández Vara, ha dado un giro de 180 grados, se quiera reconocer o no, al panorama político de la región y sobre todo al devenir de un partido como el socialista, que lidera el gobierno extremeño, en una legislatura en la que en los últimos tiempos ha primado más la preocupación por los problemas internos  por encima de todo lo demás, cuando esta comunidad precisa de 25 horas la día dedicación, no es una frase mía, pero sí cierta, algo que los ciudadanos exigen, demandan pero no aprecian.

Primero Eva María Pérez, antes de la campaña de las primarias, y después, Leonor Martínez- Pereda Soto, después de la elección del secretario general, han hecho públicas sus intenciones y presentarán batalla a Fernández Vara, por ocupar el sillón de la máxima responsabilidad del PSOE en Extremadura, y a continuación optar a dirigir los designios de la región. Pero seguramente habrá más candidatos, y aunque el tiempo apremia, hay días para ello.

Ambas coinciden en tres aspectos importantes: Socialistas de vieja cuna y alta convicción , por lo que conocen los entresijos del partido, ex-consejeras de la Junta, lo que supone saber las entrañas de la Administración, y convencidas de que el PSOE necesita un cambio urgente, drástico y sólido. Y también, experiencia curtida en mil y una batallas tanto en lo público como en lo privado.

En los círculos políticos se comenta que donde van estas dos «lobas solitarias», que frente a Vara y la maquinaria del » aparato» no tienen nada que hacer. Bueno. Sabemos de buena tinta que tanto tanto Eva María Pérez como Leonor Martínez-Pereda,  al dar el paso que han dado, saben muy bien lo que quieren y el por qué lo han hecho. Otra cosa es que yerren. Las dos tienen  partidarios muy afines que las defienden por encima de llamadas, conversaciones y presiones. Sea quizás Leonor, más conocida como Loncha, » la más guerrera «,  ya que es muy activa en la red social Facebook, donde sus posts son muy comentados por  amigos y seguidores, no todos, por cierto, del ámbito socialista. En los últimos meses, se ha caracterizado por apoyar incondicionalmente al recién elegido secretario general, Pedro Sánchez, interviniendo en uno de sus mítines en Extremadura, y rebelarse continuamente contra todo aquello que no rezume protagonismo de la militancia. Es como se dice » una auténtica mosca cojonera» que va dar muy mucho la lata en pos de su objetivo final. Por su parte,  Eva María Pérez,  se prodiga menos en las redes sociales, de momento, aparentemente parece menos vehemente que su compañera de intenciones, quizás tenga menos tirón mediático pero mantiene contactos internos y continuos, va pian pianito andando el caminito  y tiene programada una estrategia, coordinada por un equipo en el que confía plenamente. Es parlamentaria en la Asamblea de Extremadura y por tanto, sus contactos en el seno del grupo y del partido son habituales e intensos.

A la espera de que surja algún que otro candidato, se comenta que un tercero pudiera ser Miguel Angel Gallardo, actual presidente de la Diputación pacense, y dada la premura de tiempo – se acaban de celebrar los congresillos para la elección de  delegados que asistirán al Congreso Federal- la posición de los pretendientes a ser el máximo – o la máxima – responsable del PSOE en Extremadura se irá clarificando más temprano que tarde y puede que haya alguna que otra sorpresa en tal coyuntura.

Por aquello de » divide y vencerás»,  el actual mandatario, Fernández Vara, podría estar tranquilo y no dudar de su reelección pero si nos fijamos en los comentarios internos y externos que se han vertido contra su persona, muchos de ellos muy desagradables, las sensibilidades socialistas están muy a flor de piel y en la actualidad, las tendencias son las que son. faltan los pronunciamientos. Que los habrá. Dato muy a tener en cuenta. Compaginar  su responsabilidad como  Presidente de la Junta de Extremadura, con todo lo que ello conlleva – 25 horas al día de dedicación ante la variada gama de problemas que hay – un calendario o agenda a prueba de la mejor salud,  la vorágine de acontecimientos internos, y a su vez estar pendiente de sus, de momento,  dos contrincantes,  que se volcarán mucho más en sus posicionamientos y contactos, por mucho que parezca o se diga que no son rivales, es algo que hay que considerar muy mucho.

Por ello,  viene a colación  terminar con una frase popular que cada uno puede aplicar como se quiera: » Largo me lo fiáis, querido Sancho». El nombre de Sancho lo pueden ustedes cambiar por quien les parezca oportuno.

 


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