El Complejo Turístico Marina Isla de Valdecañas sigue estando en el foco de la información por su trascendencia social que data de 2006.
Una vez conocido el informe pericial científico que ha llevado a cabo la Estación Biológica Doñana, los ecologistas demandantes, Adenex y Ecologistas en Acción consideran que no queda resquicio alguno para que el TSJEx no resuelva favorablemente la demolición o desmantelamiento del complejo para que después se proceda a la restauración ecollógica de la zona.
Tras un dilatado proceso de elaboración, la Estación Biológica de Doñana, dependiente del CSIC, ha elaborado un completo informe, de casi 1.200 páginas, en el que responde a las catorce preguntas planteadas por la Sala Contencioso-
Para Ecologistas en Acción y Adenex, las conclusiones no dejan lugar a dudas, cuando concluye que “mantener el Complejo en su estado actual no puede considerarse en modo alguno una medida de conservación, sino la opción más perjudicial para la ZEPA, solo superada por el detrimento que causaría terminar de ejecutar el Proyecto de Interés Regional. Por tanto […] la opción más beneficiosa es la restauración ambiental de la isla”.
Para estos dos colectivos, la demolición es la opción más adecuada » puesto que la demolición seguida de una restauración ecológica tendría un impacto ambiental positivo sobre la ZEPA a largo plazo, en la medida en que suprime un foco de actividad humana permanente y devuelve el espacio ocupado, creando oportunidades de regeneración de los procesos ecológicos y de restablecimiento de la biodiversidad perdida por el uso urbano”, algo que tira por tierra los argumentos de la propiedad y de la Junta de Extremadura, empeñados en intentar demostrar que la demolición es más perjudicial para el medio ambiente que el mantenimiento de las construcciones y su uso.»
Entre otros considerandos, en la nota enviada a redacción DEx se indicaasimismo que » el informe pericial supone un fortísimo varapalo para las pretensiones de los propietarios y de la Junta de mantener la urbanización argumentando una mejora del ecosistema, lo que les permitiría su mantenimiento según la Ley de Suelo extremeña. Todo lo contrario, el informe remacha que “La construcción del Complejo y su funcionamiento han tenido diversos impactos ambientales, negativos y de consideración, sobre la isla y la ZEPA […], lo que teóricamente supuso la desaparición de un tercio de las especies de aves terrestres en época de reproducción y de un quinto de las especies invernantes. La mayoría de estas especies estaban protegidas por la ley”.
Las organizaciones ecologistas que recurrieron este proyecto de urbanización, Ecologistas en Acción y Adenex, entienden que » sobre la base de lo constatado con toda rotundidad en este informe científico y lo ya manifestado por el Tribunal Supremo respecto al PIR de Valdecañas no existen razones de orden legal ni material que impidan la ejecución de la sentencia que en su día dictó el TSJE. Por tanto, se debe proceder a la demolición del complejo urbanístico buscando el mejor escenario de restauración del espacio protegido por la Red Natura 2000, restituyendo así la legalidad urbanística tras más de una década de proceso judicial.»
También quieren recordar que » de haber hecho caso a sus argumentos y haberse paralizado cautelarmente las obras durante el proceso y, sobre todo, tras las primeras sentencias que ganaron en los tribunales antes de que se realizara el grueso de la urbanización, nos habríamos evitado una gran cantidad de problemas, gastos y daños al ecosistema. Por ello refrendan su intención de exigir el cumplimiento de la sentencia y, con la fuerza de los argumentos de este informe del CSIC, que se proceda a la demolición de lo urbanizado y a la regeneración de la zona. »