Introducción
En los últimos tiempos, la aparición de redes sociales, blogs, webs y demás plataformas de contenido online ha sido masiva, con lo que Internet se ha transformado en un espacio donde la libertad de expresión semeja no tener límites. En este nuevo contexto en el que cualquier navegante puede publicar, informar o bien opinar… conceptos como el de identidad digital o reputación online, han cobrado una singular relevancia y se han transformado en puntos de interés y preocupación creciente tanto para empresas como para particulares.
Y es que en el planeta actual, donde todo se busca en Google, la información que aparece sobre nosotros, o de nuestra marca, en las primeras páginas del buscador, adquiere una suma importancia. Por este motivo, es conveniente que toda persona conozca y controle, dentro de lo posible, lo que se publica sobre ella en internet.
¿Qué es la reputación online?
Para comprender lo que es la reputación online debemos valorar antes el término de identidad digital. Las dos son nociones relacionadas entre sí, y no pueden explicarse la una sin la otra, aunque sean son cosas distintas.
La identidad digital es la imagen que proyectamos sobre nosotros mismos a través del comportamiento y las acciones que realizamos en el planeta digital.
No nos engañemos, las acciones y el comportamiento que mostramos fuera del planeta en línea pueden determinar nuestra identidad digital. Asimismo, puede ser un artículo de un medio, una publicación en nuestro perfil personal en una red social o bien un comentario en un portal de creencias, quien influya en su contenido. Como vemos, la identidad digital no depende de uno mismo al cien por ciento .
En cambio, la reputación online, puede definirse como la percepción y la valoración que el resto de usuarios tiene de nosotros tras valorar, exactamente, nuestra identidad digital
Podríamos decir que la identidad digital sería algo como la representación sobre nosotros mismos que existe en Internet y que creamos conforme a lo que hacemos y lo que expresamos (tanto en internet como fuera de ella), al tiempo que la reputación en línea sería la percepción que el resto tienen sobre estos actos o bien expresiones y, en consecuencia, el prestigio que tenemos.
¿Por qué razón es esencial tener una reputación en línea positiva?
Tanto empresas como particulares son, cada día, un poco más conscientes de la relevancia de contar con una reputación en línea positiva, con lo que cada vez invierten más sacrificios en administrarla y supervisarla apropiadamente.
En el caso de las compañías o marcas, resulta evidente que contar con una buena reputación es esencial, puesto que no sólo favorece una mayor venta de productos o contratación de servicios, sino que ayuda a fidelizar clientes del servicio, prosperar el posicionamiento y afianzar la imagen de marca.
En el caso de los particulares, puede resultar esencial supervisar la información sobre ellos mismos en internet, puesto que puede ser determinante en ciertas situaciones como, por poner un ejemplo, en la busca de empleo, en tanto que muchas empresas examinan la información existente en Internet sobre sus aspirantes ya antes de contratarlos.
¿Qué elementos determinan la reputación online?
Muchos son los elementos y situaciones que influyen en la creación de nuestra reputación on line. Ciertos de ellos dependen de forma directa de nosotros y son parcialmente controlables. En cambio, hay otros que proceden de terceros y que escapan a nuestro control.
Nuestro perfil en las redes sociales, nuestra web profesional o bien la de nuestra empresa, nuestro blog personal… son recursos que dependen de nosotros mismos y que determinan en buena medida nuestro prestigio en línea. Publicar contenido y también información de utilidad de forma periódica, resguardar nuestra privacidad, eludir discusiones o bien enfrentamientos y ser uno mismo, son ciertas recomendaciones que pueden asistirnos a sostener una buena imagen.
Sin embargo, Internet es un espacio de libertad donde todo el planeta puede opinar y comentar. Con independencia de lo controlados que tengamos todos estos espacios, existe el peligro de que una tercera persona haga un comentario o una publicación negativa.
¿De qué manera supervisar tu reputación online?
Es lógico meditar que si lo que determina en mayor grado la reputación online de una persona es su comportamiento y acciones. Lo primero que debemos hacer para tener una buena reputación es administrar lo que hacemos y expresamos en internet, puesto que todo queda registrado. Para esto hay muchos recursos que pueden asistirnos a dirigir mejor nuestras plataformas: Hootsuite, Tweetdeck, Buffer, Later… Todas y cada una nos dejan ahorrar tiempo programando contenidos y, además, cuentan con estadísticas e informes para examinar el resultado de cada publicación.
Podemos localizar otras plataformas que hallan lo que otros publican sobre nosotros. Por ejemplo, las alarmas de Google o Social Mention, una de las herramientas de monitorización de redes sociales poco a poco más popular. Social Mention da un análisis de la naturaleza de lo que se afirma de alguien en las redes y en la página web.
¿De qué forma solventar afectaciones a nuestra reputación online?
Si localizamos afectaciones que puedan influir de forma negativa sobre nuestra reputación en línea, hemos de saber qué medios tenemos a nuestro alcance para solventarlas. Debemos examinar cuál es el inconveniente para saber si se trata de una crisis real de nuestra reputación o son comentarios o críticas negativas puntuales.
Ante un comentario ofensivo que sólo busca hacer daño es mejor no responder para no hacer más grande el inconveniente. Si vemos que podemos solventarlo, podemos dar una contestación objetiva y razonada mostrando una actitud próxima y honesta. Si el comentario es fundado, aceptaremos el fallo y nos excusaremos por él. Explicaremos qué ha sucedido y las medidas que vamos a tomar para solventar el accidente y eludir que suceda nuevamente.
A veces, es posible que las afectaciones traspasen la línea de simple comentario y dañen, por servirnos de un ejemplo, nuestro derecho al honor. En estas situaciones siempre y en toda circunstancia podemos recurrir a los elementos de demanda de las distintas plataformas como Fb, Twitter, Instagram o Google.
Fuente: http://tublogtecnologico.com/
