El Cacereño y el Getafe B se repartieron los puntos en un partido sin goles ni ocasiones claras, que dejó un sabor agridulce a ambos equipos. El conjunto local, que buscaba su segunda victoria consecutiva, no pudo romper la férrea defensa del filial azulón, que sumó su primer punto fuera de casa.
El partido comenzó con un ritmo lento y sin apenas llegadas al área. El Cacereño intentaba llevar la iniciativa, pero se encontraba con un Getafe B bien plantado y ordenado, que no concedía espacios. El equipo visitante se limitaba a esperar atrás y salir al contragolpe, pero tampoco inquietaba al portero rival.
La primera parte transcurrió sin apenas sobresaltos, salvo algún disparo lejano sin peligro. El Cacereño lo intentaba con centros laterales, pero la defensa del Getafe B despejaba todo lo que llegaba. El equipo madrileño solo tuvo una ocasión en un córner, que remató de cabeza Charaf y que detuvo el guardameta local.
La segunda parte fue más de lo mismo. El Cacereño seguía dominando la posesión, pero sin profundidad ni creatividad. El Getafe B se defendía con solvencia y buscaba sorprender con alguna jugada aislada. El partido entró en una fase de aburrimiento y monotonía, que solo se rompió con los cambios.
El entrenador del Cacereño movió el banquillo e introdujo a Tellechea, Iván Fernández, Deco, Lobato y Diego Díaz por Telles, Jorge Barba, Karim, Matovu y Viñuela. El técnico buscaba más frescura y verticalidad en ataque, pero el resultado fue el mismo. El Getafe B también hizo cambios y dio entrada a Alejandro Herranz, Calçada, Facu Esnaider y Marcos Denia por Charaf, Patrick, Jordi Martín y López. El equipo visitante ganó algo de presencia ofensiva, pero tampoco logró generar peligro.
El partido se fue apagando poco a poco, hasta que llegó la jugada más polémica. En el minuto 88, Lobato vio la segunda tarjeta amarilla por una falta sobre García y fue expulsado. El jugador del Cacereño protestó airadamente al árbitro y tuvo que ser sujetado por sus compañeros. El equipo local se quedó con diez jugadores y tuvo que aguantar los últimos minutos con más corazón que cabeza.
El árbitro pitó el final del partido y ambos equipos se marcharon al vestuario con la sensación de haber dejado escapar dos puntos.
El Cacereño se queda con cinco puntos y es tercero en la clasificación. El Getafe B suma dos puntos y es decimocuarto. La próxima jornada enfrentará al Cacereño con el Mensajero. Por su parte, el Getafe B se medirá ante la Gimnástica Segoviana.