Madrid.- Telefónica ha anunciado que el próximo 19 de abril marcará el final de las conexiones ADSL en España, completando así el ‘apagón’ de la infraestructura de cobre que la compañía ha estado gestionando desde 2014. Este paso no solo representa el cierre de 8.532 centrales de cobre, sino también un cambio significativo en la forma en que los españoles se conectan a internet.
Con la transición completa a la fibra óptica, Telefónica promete una mejora sustancial en las prestaciones y velocidades de conexión, además de una reducción en el consumo energético y la huella de carbono. Este cambio tecnológico coincide con el centenario de la compañía en España, simbolizando una nueva era de innovación y compromiso con el medio ambiente.
No obstante, la transición plantea desafíos para los más de 440.000 hogares que aún dependen del ADSL. Telefónica ha hecho esfuerzos considerables para contactar a estos usuarios y asegurar su transición a la fibra, pero aún hay quienes no han respondido. Con el ‘apagón del ADSL’, estos hogares tienen un tiempo limitado para garantizar su acceso continuo a internet.
Mientras Telefónica lidera el cambio, otras operadoras como Vodafone también han anunciado planes para cerrar sus centrales de cobre en los próximos meses. Para aquellos hogares donde la fibra aún no ha llegado, la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales (SETELECO) asegura que el 89,87% del país ya cuenta con conexiones por fibra. En caso de no disponer de esta tecnología, se insta a los usuarios a contactar con sus proveedores para explorar alternativas que aseguren su conexión de telefonía fija e internet.
Este paso adelante en la infraestructura digital de España no solo refleja el compromiso de Telefónica con la innovación, sino que también establece un precedente para el resto del sector, marcando el comienzo de una nueva era de conectividad en el país.
