El Valle del Jerte situado en la parte norte de Extremadura cuenta con un millón de cerezos, que producen la famosa cereza en su variedad picota, y en estos días de mitad del mes de marzo, por San José, es una maravilla ver la explosión floral de color blanquecino, de tal manera que cada día hay miles y miles de turistas con el fin de tener la grata experiencia personal de verlos al natural.
Tengo el honor de haber sido el “culpable”, entre comillas de haber conseguido que esta fiesta turística regional sea nombrada de Interés Turístico Nacional, pues de esta manera la Dirección General de Turismo de España es la encargada de promocionarla por todo el país.
Las frutas, las ricas cerezas, que tienen su propia Denominación de Origen Protegida, se suelen recoger por el mes de junio, siendo una maravilla poderlas encontrar en los mercados de España y del extranjero, por eso National Geographic ha catalogado al Valle del Jerte como una de las 18 maravillas naturales de este país.
Este bello paisaje lo completan las famosas gargantas, que son lugares estrechos por donde hay cascadas de los ríos que circundan el valle y van a dar al río Jerte, sobresaliendo la Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos, sin olvidarse de los famosos Pilones, un monumento natural, ideal para bañarse en verano.
Para terminar, hay que ver y disfrutar de su arquitectura serrana, destacando el pueblo de Cabezuela del Valle, declarado conjunto histórico – artístico, como disfrutó esta comarca el emperador Carlos V que pasó por ella en 1556 camino de su última morada, en el cercano Monasterio de Yuste declarado Patrimonio Europeo.
Vea el reportaje completo editado en el programa «En Directo» picando este enlace:
https://youtu.be/b9b3DDzDp5g?si=cfR92d7GzPfksPjH
Juan Francisco Rivero
Cronista de Las Brozas
