Seis de la mañana, salida para Madrid. Reunión en Ferraz con Pedro Sánchez a las diez y media para analizar los resultados de las elecciones en Extremadura. Casi un 42 por ciento de los votos en las elecciones autonómicas en nuestra tierra. El mejor resultado de cualquier partido en España lo hemos logrado en el PSOE de Extremadura. Los únicos que hemos superado el 40 por ciento. Le he agradecido su trabajo en la campaña y desde que llegó a la secretaria general del PSOE para cambiar el escenario que había hace un año. En Extremadura ganamos las elecciones europeas hace un año, pero hemos conseguido mejorar nuestro porcentaje de voto en cuatro puntos. Un año de mucho trabajo pensando solamente en los problemas de la gente. Hemos quedado en hablar con todos los partidos en Extremadura e intentar conformar mayorías progresistas en todos los ayuntamientos en los que sea posible. Hay que sumar. Son tiempos de escuchar y encontrar espacios donde entendernos para conformar mayorías que permitan cambiar las cosas. Para que la esperanza pueda formar parte de la vida de los extremeños.
Tengo la suerte de haber sido el primer político en España en publicar su nómina hace ya muchos años, su declaración de la renta cuando no era obligatoria, la declaración de bienes con “testimonio del origen de los mismos”, la renuncia al aforamiento que era solo un gesto según los que no lo hicieron, pero que anticipaba lo que vamos a hacer en los próximos meses en la Asamblea de Extremadura. En 19 años de concejal, de director general, de consejero, de diputado y de presidente, NUNCA cobré dietas ni kilometrajes, nunca tuve tarjetas ni blancas ni negras. Pedí que ingresarán en la cuenta de la Junta de Extremadura las compensaciones que me correspondían por mi pertenencia y asistencia a los órganos de la Unión Europea. Una cargo, un sueldo. El de ahora es más que digno. Gano 2.700 euros netos como diputado y presidente del grupo parlamentario socialista. Y cobro mis trienios como miembro del Cuerpo Nacional de Médicos Forenses.
