El secretario general de CCOO en Extremadura, Julián Carretero, ha considerado que con el ejecutivo del ‘popular’ José Antonio Monago actualmente hay «bastante más incertidumbre para el futuro» de la comunidad que cuando accedió al gobierno hace tres años, y «hoy hay más paro, menos empresas y menos servicios públicos».
Ha afirmado igualmente que con la política del PP en la región «deja de lado los verdaderos problemas de la gente» para centrarse, ha indicado, en otras cuestiones como «la inversión en propaganda».
Carretero ha advertido de que actualmente «hay más gente en la cuneta» y en la «pobreza» que cuando accedió el ‘popular’ al poder.
En cualquier caso, ha señalado que a su juicio los extremeños “no son tontos» y «no» se han convencido de las políticas del PP, a pesar de que el Ejecutivo autonómico ha gastado, indica, «en la marca Monago y no en la marca Extremadura y en la marca de las personas».
«Afortunadamente (el Gobierno regional) no ha sido capaz de convencer a los extremeños de que en estos momentos su política es adecuada para los intereses» de la comunidad, ha sentenciado el sindicalista.
Además, ha recordado también que la Administración autonómica ha «dispuesto de la mayor inversión en propaganda que ningún presidente de la Junta ha dispuesto».
«Todo lo que era la centralidad marca Extremadura ha pasado a ser central para marca Monago. A pesar de todo eso y de contar con el mayor equipo de asesoramiento propagandístico que ha habido en la historia de la región Monago afortunadamente no ha sido capaz de convencer a los extremeños, al pueblo extremeño, de que en estos momentos su política es adecuada para los intereses regionales, de la gente», ha apostillado.
«Hoy hay más paro, hoy hay más empleo destruido, hoy hay peores servicios públicos que cuando llegó, hoy hay menos empresas que cuando llegó, hoy hay bastante más incertidumbre para el futuro que cuando llegó», ha subrayado.
En este sentido, ha añadido también que «hoy hay bastante menos confianza en un gobierno que sólo se dedica mayoritariamente a la propaganda, al boato y a la grandilocuencia, pero que deja de lado los verdaderos problemas que tiene la gente».
