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LA TASA DE PROBREZA AUMENTA EN EXTREMADURA

OPINIÓN
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[Img #41696]La pobreza en Extremadura se ha diversificado. Hay pobres que lo son porque no tienen prácticamente qué comer y viven como pueden con los subsidios sociales y la bolsa de Cáritas y hay otros pobres que aun trabajando no llegan a final de mes porque los salarios son de miseria. Los primeros existen desde tiempo ha y los segundos son los nuevos, esos de los que presume el Partido Popular con chapa en el pecho y que engrosan las cifras para que Monago y los suyos digan que ha disminuido la tasa de paro. Es cierto, el desempleo ha bajado pero con sueldos de miseria y con contratos de un día, una semana, un mes…, en definitiva, que eso no es trabajar ni nada que se le parezca. Tengo amigos que cobran lo mismo que hace diez años. Por aquel entonces el sueldo no era malo; ahora es pésimo, Hoy es difícil encontrar salarios superiores a los mil euros, por no citar a los pensionistas, cuya pensión media es más o menos de 700 euros, con el agravante que también tienen que acudir a los comedores de Cáritas pues tienen a su cargo a los hijos y nietos, todos en paro.

 

Esa es la Extremadura real, la del día a día, y no la de las alharacas y chapitas verdes, blancas y negras que los populares exhiben en la solapa, como aquellos que hubiesen descubierto América a estas alturas. Todo es falso. Todo es mentira. De ahí viene el desencanto social de una buena parte del electorado del PP que optará por Guillermo Fernández Vara, por el voto en blanco o por Podemos, porque no se piense Monago que se va a escapar del desgaste, no. La Administración regional tiene cerca de 50.000 empleados públicos que han visto como se recortaban sus derechos laborales y salariales durante el mandato del PP en la Junta de Extremadura y eso se paga en las urnas, como no podía ser menos.

 

Según distintos estudios datos a conocer esta semana, la tasa de pobreza en Extremadura al día de hoy el del 36,1%, es decir, que uno de cada tres extremeños sobreviven como pueden al frío invierno sin apenas nada que llevarse de comer a la boca. Otro dato importante de la gestión de Monago al frente de la Junta de Extremadura: la población con carencias materiales ha pasado de 14.331 personas  a 40.848 en 2013, y todo como consecuencia del Gobierno extremeño del Partido Popular. Pero hay datos que ponen el vello de punta: 50.000 hogares tienen a todos sus miembros en paro, lo que significa que no hay ingresos que no sean los asistenciales, siendo está cifra superior en 30.000 hogares que cuando Monago accedía a la Presidencia de la Junta. La cifra de parados en la región es de 141.800 y 64.300 de ellos no tienen prestación social alguna.

 

Todo esto trae como consecuencia los desahucios de las viviendas de los parados, que no pueden pagar la renta por ser deudores hipotecarios o de viviendas sociales, lo que ha convertido a la Junta extremeña del PP como el principal agente desahuciador de la región.

 

Y todo esto, en una situación límite en la que Monago y los suyos presumen de logros cuando han hipotecado la Junta de Extremadura en cerca de 5.000 millones de euros, pero, lo peor de todo, es que la señora vicepresidenta y portavoz del Gobierno, doña Cristina Teniente, sigue sin responder a la pregunta que le vengo formulando desde el mes de noviembre: ¿En qué se han gastado 5.000 millones de euros si está todo patas arriba? Les cuento el caso de un pequeño proveedor al que la Junta le adeuda una cierta cantidad de dinero. Como son varias facturas, le van a pagar una de 300 euros; el resto, “espere usted sentado”, le dijo la funcionaria en cuestión. Esta es la Extremadura real de Monago y sus chapitas, porque el muy pillo dice que ha creado 35.000 puestos de trabajo pero no dice, porque no interesa claro, los que se han destruido a lo largo de la legislatura.

 

Es la Extremadura real: la del paro, la del subsidio y algún caso de corruptela, por no llamarla corrupción, que daremos a conocer en su momento. Pero detrás de las cifras hay personas que sufren porque no tienen qué darle de comer a sus hijos y la bolsa de Cáritas, bendita organización de la Iglesia Católica, llega hasta donde llega. Son alimentos básicos los que pueden ofrecer. Ayer mismo pagué yo el sello de Cáritas de mi parroquia para todo 2015. Prefiero hacerlo así porque me fío de esta institución.

 

Lástima que no pueda fiarme igualmente de Monago y sus niños con chapitas, que se van a gastar una cantidad enorme de dinero en la campaña electoral para distorsionar la realidad y vender humo, que es lo que han venido haciendo en los últimos cuatro años. Es igual que el vídeo de Monago haciendo running por la dehesa extremeña. No sé a qué cabeza pensante se la habrá ocurrido que no nos íbamos a dar cuenta de que es prácticamente idéntico a un spot publicitario de televisión de hace cuatro o cinco años de un multivitamínico de esos que venden en las farmacias. Y seguro que encima al creativo le han pagado un pastón. Pues no, es una burda copia ya retirada del mercado, lo mismo que lo extremeños deberían hacer con Monago, un trapo viejo y sucio por donde quiera que se mire. No sirve ni para limpiar el polvo, con eso lo digo todo.

 


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