Hola querido amigos y amigas . Ayer al terminar el día tenía una extraña sensación de cansancio por el largo día y de ganas de que llegara el siguiente. En Olivenza tengo la percepción de que todo se transforma en pura normalidad. “Suerte Guille” cuando fui a por los periódicos, “me alegro por tí y por nosotros” cuando fui a por el pan… Esta mañana ya dejé cerrado el nuevo consejo de gobierno, ya lo estaba días atras, perfilé los últimos flecos y cerré esa carpeta. La había abierto meses atrás. En semana santa me reuní con un grupo de personas de dentro y de fuera de la administración y les pedí que me ayudaran a hacer los cambios que creía que eran necesarios en la estructura y dimensionamiento de la Junta de Extremadura. Incluso alguna decisión que no me atreví a tomar en 2007 la tomaré ahora, porque creo que es oportuna y necesaria. Hay que unir aquellas competencias que sirven a objetivos comunes.
Mañana por la tarde anunciaré la estructura y los nombres que me acompañarán. Y les pediré que tengan en cuenta el Manual de Estilo que presenté en el debate de investidura. Y que saquen lo mejor de la buena gente que van a econtrar en la administración.
Salí un rato a dar buena cuenta de unos tomates ecológicos que junto a unas cervezas pude compartir con un grupo de amigos. “Se te ve contento”, me dijo uno de ellos. Contento no es la palabra. Tranquilo sí. Cuando la conciencia está tranquila no se atormenta ni te atormenta.
Mañana será de nuevo un largo día. Por la mañana me reuniré con los Directores de los Medios de Comunicación para poner en marcha uno de mis compromisos. Con la libertad de prensa. Después convocaré a los responsables de las entidades financieras para el próximo viernes, para hablar de DESAHUCIOS, y comeré en el Restaurante EL YATE con los sindicatos y la patronal para recuperar el diálogo social en Extremadura.
Por la tarde se conocerán los cambios en las Consejerías, su reducción a CINCO, los nombres de sus titulares y los datos de sus trayectorias personales y profesionales.
Guillermo
