Se trata de un plan extraordinario destinado a todos los municipios y entidades locales menores de la provincia con población inferior a 20.000 habitantes y es un complemento al resto de los planes y programas de inversión que tramita la Diputación.
El portavoz del equipo de Gobierno y diputado de Infraestructuras, Fernando García Nicolás, ha señalado que el objetivo principal es que los ayuntamientos puedan prestar competencias locales básicas que redundarán, además, en un mayor desarrollo económico y social.
De esta forma, se mejorará la calidad de infraestructuras esenciales y se dinamizarán los entes locales de la provincia ya que permitirá generar empleo en los pueblos, especialmente en las empresas de la construcción.
García Nicolás ha insistido en la urgencia de poner en marcha el plan porque estas inversiones no solo son necesarias para los ayuntamientos sino también para las empresas de la construcción, que pasan por un momento delicado y este plan será «un balón de oxígeno» para el sector.
El programa se circunscribe a seis materias: saneamiento, abastecimiento y distribución de agua (redes), alumbrado público, vías públicas, parques y jardines, instalaciones deportivas y caminos vecinales.
Está dotado con un total de seis millones de euros y su financiación correrá íntegramente a cargo de los fondos propios de la Diputación, los ayuntamientos no tendrán que aportar nada.
El programa está financiado con el remanente de Tesorería derivado de la liquidación del presupuesto del año 2016, y cada municipio podrá recibir desde un mínimo de 16.000 euros (en base a su población) hasta un máximo de 168.000, como es el caso del municipio de mayor población: Navalmoral de la Mata.
Desde la Institución Provincial han informado de que aun restan en torno a 25 millones de euros del remanente, «que no podrán ser invertidos en la municipios de la provincia debido a los límites establecidos en la Ley de Estabilidad Presupuestaria»; por lo que el Grupo Socialista de la Diputación ha insistido en la «necesidad de flexibilizar el techo de gasto para las entidades saneadas».
