La investigación continúa abierta y hasta la fecha hay ocho delitos de provocación sexual totalmente identificados, aunque la cifra puede aumentar, ya que se piensa que puedo tener la misma conducta con otros nueve, según ha informado la Guardia Civil en un comunicado.
Aunque los contactos presenciales no llegaron a producirse, el Código Penal castiga con penas de prisión de hasta tres años cuando estos intentos se producen con esa finalidad y con menores de 16 años, ha advertido.
A raíz de las denuncias que recibió el Equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Llerena (Badajoz), esta unidad, auxiliada por otras del cuerpo, abrieron la denominada operación «Cubriña» para investigar los hechos.
Tras dos registros domiciliarios autorizados por el Juzgado de Instrucción de Llerena, se detuvo a un vecino de Berlanga, que para concertar los contactos utilizaba links y direcciones de correo que aún están siendo analizadas.
La Guardia Civil ha animado a cualquier menor de 16 años a denunciar este tipo de invitaciones y les ha pedido que desconfíen de identidades, informaciones y promesas procedentes de las redes sociales.
Además, ha aconsejado a los menores que lo pongan en conocimiento de sus padres y a denunciar siempre que sean propuestas de encuentros con fines sexuales.
