La pandemia y el futuro de España han centrado la segunda edición del Foro La Toja, inaugurada el pasado jueves 1 de octubre. Una cita de referencia de debate intelectual y académico del ámbito español, cuyas ponencias se han enfocado en la reconstrucción tras la pandemia de todos los ámbitos de la sociedad.
Entre las diversas intervenciones, la segunda jornada de este foro atlántico de debate, inaugurado por el Rey Felipe VI y el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, ha puesto también su mirada en los jóvenes, uno de los grupos más perjudicados en su presente y futuro por la crisis sanitaria.
El viernes 2 de octubre, mediante la ponencia `Un diálogo intergeneracional sobre valores´, se puso sobre la mesa de debate el futuro de estas generaciones más jóvenes, en la que participaron Rocío Martínez-Sampere, directora de la Fundación Felipe González; Lucía Gandarillas, The Aspen Institute España Alumni; y Antonio Huertas, presidente de Mapfre.
Entre las aportaciones del ponente Antonio Huertas, presidente de Mapfre, estuvo la defensa de la necesidad de reformas importantes que permitan reducir la brecha formativa para seguir proyectando un futuro. Además, Huertas recordó la responsabilidad que tienen para que los millennials que ya vivieron la crisis del 2008 no “se planten en los 40 sin haber tenido la oportunidad de tener un trabajo digno”.
Considera que la educación “es la gran puerta que abre el camino al progreso y la igualdad”, y sentencia que “el mundo ya era tecnológico antes de la pandemia. Lo que ha hecho la COVID-19 es evidenciar quiénes estaban preparados para resolver los retos que venían y quiénes no”.
Sampere, directora de la Fundación Felipe González, ha destacado la necesidad de “aprender a vivir en el cambio y por lo tanto formarse en capacidades más estructurales que específicas” que permitan “aprender permanentemente a lo largo de la vida”.
La preocupación no es para menos. La Organización Internacional del Trabajo ha publicado una encuesta mundial sobre los jóvenes y la pandemia de la COVID-19, llevada a cabo entre abril y mayo de 2020 por los socios de la Iniciativa Mundial sobre Empleo Decente para los Jóvenes.
Los datos arrojados son desoladores: en ella se apunta que “el impacto de la pandemia en los jóvenes es sistemático, profundo y desproporcionado. Éste ha sido particularmente duro para las mujeres jóvenes, los jóvenes de menor edad y los jóvenes que viven en países de ingresos más bajos”, apuntan desde su web, donde puede descargarse el informe completo.
Fuente declaraciones del Foro La Toja e imagen: Forbes
