Ya es oficial lo que se temía desde las últimas horas: la Liga anuncia este jueves que suspende las próximas jornadas de competición en Primera y Segunda División por la crisis del coronavirus. Hasta ahora había medidas estrictas de salud públicas impuestas por Sanidad, que incluían disputar las próximas fechas sin público en las gradas, pero se da un paso más en la contención evitando los viajes y aglomeraciones de cualquier tipo.
De momento no hay calendario oficial para volver a la disputa de los partidos.
La LFP, el organismo que engloba a los clubes profesionales de Primera y Segunda, estaba reticente a la suspensión, pero fue algo que le solicitó Luis Rubiales, presidente de la Federación de Fútbol, en una reunión que mantuvo con la Liga. «Ante las circunstancias conocidas esta mañana, referidas a la cuarentena establecida en el Real Madrid y los posibles positivos en jugadores de otros clubes, LaLiga considera que se dan ya las circunstancias para que se siga con la siguiente fase del protocolo de actuación contra el COVID- 19», decía la Liga en un comunicado.
«En consecuencia, de acuerdo con las medidas establecidas en el Real Decreto 664/1997 de 12 de mayo, acuerda el aplazamiento, al menos, de las dos próximas jornadas«, informó sobre el periodo mínimo al que afectará la suspensión.
Su presidente, Javier Tebas, tenía la dificultad añadida de que varios clubes habían protestado por tener que jugar a puerta vacía en sus estadios, con el daño que genera en la competición y en su recaudación económica por la falta de entradas. También algunos jugadores, como Dani Carvajal del Real Madrid, se atrevieron a alzar la voz para protestar, porque consideraban que también hay riesgo de contagio para ellos, pero no se les tiene en cuenta ni a profesionales ni equipo técnico y otros trabajadores de clubes y la competición.
Además, también se ha sabido que puede que la Eurocopa se aplace a 2021. La UEFA está siguiendo las recomendaciones de los organismos sanitarios internacionales para atender a estos criterios, pero más allá de estos asuntos, también preocupa el calendario: si las competiciones ligueras de cada país se retrasan por el coronavirus, no habrá espacio en los meses de verano para la correcta disputa del gran torneo de selecciones en Europa.
