La consejera ha puesto en valor resultados “tan magníficos en un escenario de máxima dificultad”, que añade valor y prestigio a la tarea que han hecho las mujeres y hombres del Plan Infoex. Begoña García ha asegurado que “las novedades que cada año vamos introduciendo nos ayudan a hacer frente a los incendios forestales con más eficacia y que poco a poco empiezan a tener consecuencias positivas las obras de mejora en el monte, los nuevos puestos de vigilancia, el proyecto mosaico y las nuevas tecnologías”.
Según los responsables del Infoex, durante la primera parte de la campaña las condiciones de temperatura y humedad fueron muy favorables. De las 3.122,88 hectáreas, 1.173 hectáreas pertenecen a pastos, 873,37 a matorral, 599,7 a dehesa, 362,8 a arbolado, 107,9 a monte abierto y 5,72 a humedales.
Los incendios más destacados fueron los declarados en San Vicente de Alcántara, el 4 de agosto, con 117,3 hectáreas (regenerado de pinar); en Alcántara, el 21 de agosto, con 294,58 hectáreas de matorral, y Cabezuela del Valle, el 25 de agosto, con 129,58 hectáreas de hojarasca y matorral calcinadas.
Respecto a la causalidad de los incendios, en esta ocasión ha sido mayor la proporción de incendios negligentes o accidentales (59 por ciento) que de intencionados (34 por ciento). En negligencias y accidentes sube del 48 por ciento en 2017 al 59 por ciento en 2018.
El 30 por ciento de las negligencias y accidentes están relacionados con motores y maquinaria, y el 49 por ciento con uso de fuego en el ámbito de la agricultura y la ganadería. Más del 76 por ciento de los incendios en Extremadura están relacionados con actividades y conductas modificables en el ámbito de la agricultura, la ganadería y el sector forestal, tendencia habitual en la región.
En el plano positivo hay que destacar que las declaraciones responsables han aumentado esta campaña, 1.695 en 2018 frente a 1.009 en 2017.