El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 1 de Mérida ha desestimado las alegaciones de la empresa y le impone una sanción de 2.500 euros, importe que ya fue depositado con fecha del 8/07/20.
La sentencia reconoce que “no se ha producido ningún daño ambiental significativo, ni realizado apertura de nuevos caminos, sino utilización de las pistas o viales ya existentes, ejecutados en su día por TOLSA.
La “modificación sustancial” que motiva la sanción ha consistido en una afección a la anchura de los antiguos caminos, consecuencia de las labores de limpieza o desbroce de los mismos.
“La sentencia confirma que no ha existido daño ambiental”. Con estas palabras, David Valls, director general de Infinity Lithium en España, valora el dictamen del Juzgado de lo Contencioso Administrativo nº 1 de Mérida, que ha desestimado finalmente las alegaciones presentadas por la empresa. “A pesar de que no han tenido en cuenta nuestros argumentos, estamos satisfechos con el contenido de la sentencia, pues se demuestra que el importe de la sanción se debe exclusivamente a la consecuencia del desbroce y limpieza de los caminos, que afecta inevitablemente a la anchura”, afirma Valls.
Los caminos a los que hace referencia la sentencia no han sido obra de TEL, sino que datan de las labores de TOLSA. “TEL no ha abierto nuevos caminos, nos hemos limitado a utilizar las pistas ya existentes”, —continúa David Valls— quien sigue insistiendo que “en cuanto el Ayuntamiento nos permita acceder a la zona procederemos a la rehabilitación de los caminos afectados”
Valls destaca que el espíritu del proyecto San José Valdeflórez es trabajar de manera conjunta para fomentar el desarrollo socioeconómico y garantizar las medidas de protección ambiental.
