Aunque las estadísticas reflejan que la situación económica mejora, con un incremento del PIB en los últimos tres años, y las empresas empiezan a recuperar el nivel de beneficios, «el empleo que se crea es casi siempre precario» y los trabajadores «siguen con salarios de miseria y jornadas interminables y mal remuneradas».
Todo ello, según añade UGT, genera «un aumento de la desigualdad y un injusto reparto de la riqueza nacional».
A juicio del sindicato, la responsabilidad principal de esta situación recae en la reforma laboral del PP de 2012, «que ha otorgado un poder desmesurado a las empresas en la negociación colectiva y en las relaciones laborales».
«El mercado laboral español es el más precario y desigual de toda Europa, temporalidad creciente, contratos de corta duración y empleo a tiempo parcial involuntario», según recoge la resolución.
Asimismo, UGT ha denunciado «las pensiones miserables» y los incrementos anuales «irrisorios» de estas, que sitúan a los pensionistas «en una situación que raya la pobreza».
Con la lupa sobre Extremadura, UGT ha denunciado que el paro es del 29,23 %, una tasa que se eleva al 49 % entre los menores de 25 años, y una precariedad contractual del 97 %.
Por ello, UGT pide a la Administración central y regional que diseñen «un Plan de Choque por el Empleo» en esta región, una apuesta clara tanto por la industria (siderúrgica, turística, construcción sostenible y agroalimentaria, entre otras) como por la calidad de los productos.
El sindicato también se hace eco de la necesidad urgente de que la región disponga de un ferrocarril moderno.
Además de estos parámetros, el Comité Regional de UGT de Extremadura apuesta por la economía verde y circular, un acuerdo por la garantía de la sostenibilidad de la sanidad pública y un convenio para la implementación del trabajo decente y los ODS en las empresas extremeñas.
