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Un joven extremeño muere a golpes y puñaladas en una corrala okupa

SUCESOS
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La Guardia Civil cree que el crimen se pudo haber cometido en el transcurso de una pelea

A su llegada, los sanitarios del Summa comprobaron que el cuerpo presentaba varios golpes y puñaladas, una de ellas a la altura del hemitórax izquierdo, que le causaría la muerte. La posterior autopsia confirmó que había recibido dos heridas por arma blanca.

El grupo de Homicidios de la Comandancia de la Guardia Civil investiga los hechos y, por el momento, no se ha producido ninguna detención. La principal hipótesis que barajan los investigadores es que el crimen se produjo tras una reyerta, aunque sobre el fallecido no consta ningún antecedente relacionado contra el patrimonio.

Según declaraciones de Dioniso Vasco, alcalde de la localidad de Alcuéscar, que recoge ‘Hoy’, algunos testimonios de vecinos señalan que el fallecido había llegado al pueblo dos semanas atrás para «ir a un funeral y el domingo se fue». Varios residentes afirman que Iván había acudido a casa de un amigo en Anchuela, donde convivían un joven de 21 años, su pareja y la hija de esta.

Fuentes del Instituto Armado apuntan que la investigación está muy avanzada y que, tras la inspección ocular del escenario del crimen y el análisis de las muestras recogidas, se esclarecerán los hechos. Mientras tanto, los vecinos de Anchuela están atemorizados por la «alta conflictividad» imperante en la zona, sobre todo a raíz de la ocupación de varios pisos unos ocho meses atrás.

ESPAÑA DIARIO


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