La pregunta es muy sencilla… si tengo un negocio que más o menos funciona ¿Para qué quiero una web corporativa? Y ya puestos ¿Qué es eso de una web? Y la respuesta también es muy sencilla: hoy en día es fundamental tener una web corporativa porque actualmente, y más en un futuro muy próximo, no existes si no estás presente en Internet.

Y es que Internet es el medio principal para que los futuros compradores se informen acerca de los productos antes de decidirse a comprarlos. Reconozcámoslo, nuestros hábitos de consumo han cambiado y los posibles clientes usan Internet como medio fundamental para informarse sobre los productos antes de decidirse a comprarlos, un fenómeno que en inglés se denomina ROPO (Research Online, Purchase Offline/online).

Una tendencia aún más acentuada si pensamos en el público más joven. Y es que la falta de una fuerte presencia en Internet supone que dejaremos de existir, ya que no iremos adonde está nuestro cliente pasando el día y decidiendo sus compras. Centrarse en un público que supera cierta edad y no usa internet es limitarse a un mercado reducido, lo que no es en absoluto una sólida estrategia de futuro.

Crecimientos del 20% en plena crisis

Sabiendo que vivimos en un periodo de crisis (o quizás de cierta recuperación), seguir haciendo lo mismo ya no supone la consecución de buenos resultados automáticamente, ya que las antiguas oportunidades de negocio disminuyen y el mercado se dirige a otros espacios y a diferentes formas de relación con el cliente, verdadero juez para decidir qué negocio permanece y cuál desaparecerá. Eso de que los tiempos están cambiando no es ninguna tontería, y vamos a ver por qué.

No podemos negar que el  comercio de proximidad se mantendrá con determinados productos y nichos de mercado, ya que cuenta con una insustituible atención personal. Sin embargo, si salimos del espacio local/provincial de la tienda real y tangible, esas ventajas desaparecen.  Y en ocasiones, la atención personal no es suficiente ante factores tales como la variedad de productos y sobre todo, el precio.

Hay que suponer que el negocio de toda la vida perderá su cuota de mercado progresiva y aceleradamente en el futuro, a no ser que sepamos adecuarnos a los cambios. Unos cambios que ya están aquí.

Por consiguiente, respondemos al juego de palabras “To web or not to web” con una obviedad: TO WEB, claramente, y un “to web” lo más serio que nos sea posible con nuestras posibilidades de inversión y superando nuestro desconocimiento de todas estas nuevas formas de venta y de negocio.

¿Quieres resolver tus dudas?

Por ello, os invitamos a adentraros en esta serie de artículos acerca de diferentes aspectos sobre la promoción en internet de las empresas, ya sean tradicionales o sólo “virtuales”. Abarcaremos desde conceptos como la usabilidad web, hasta el marketing online, pasando por el posicionamiento web (SEO), el comercio electrónico, los sitios webs para móviles y diferentes temas relacionados con las oportunidades de negocio en Internet. Asimismo, el equipo de expertos de nuestra empresa: informático, economista y diseñadora gráfica, estará atento a tus dudas y sugerencias que te invitamos a plantear en el sistema de comentarios de este diario y a las que daremos cumplida respuesta. Porque estamos convencidos de que verdaderamente interesa «to web».

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