El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, comunicó al líder socialista que no manejaba «otra hipótesis» sobre la conformación de un nuevo Ejecutivo que repetir como máximo responsable.
“ No, es no”, ha venido siendo la retahíla “teñida” de soberbia y dureza que por respuesta le ha venido dando Pedro Sánchez para proclamar su rotunda negativa a formar ningún tipo de alianzas con el Partido Popular, partido ganador de las elecciones, con el que no quiere ningún tipo de alianzas ni pacto alguno para configurar un gobierno
Lo habitual en cualquier democracia Europea es que al Partido que gana las elecciones hay que respetarle su primacía y ayudar en consecuencia al mejor interés general, ayuda que habría de ir en la dirección de lo que los ciudadanos españoles dijeron en las urnas el 20 de diciembre último. Han pasado ya más de cuarenta día y cuarenta noches, y se está a la espera de que una las naciones más viejas y de más tradición, prestigio y cultura, del mundo, tenga un gobierno. La Constitución establece un sistema electoral, que para cambiarlo, se precisa una reforma constitucional, por ejemplo, para que la provincia deje de ser la circunscripción electoral, o para cambiar la distribución territorial de escaños es necesaria esa reforma constitucional que puede bloquear el PP, por su mayoría de escaños. Si se cambiara la distribución actual de escaños, Extremadura reduciría su representación en la Cámara de Diputados, lo cual no le interesa perdería representación, a pesar de que tiene las dos provincias más extensas de España.
El tema de la reforma del Senado, que proponen todos los partidos y que es un clásico en todos los programas. Incluso el del PP se ha remitido a las conclusiones de una ponencia del propio Senado que pedía una reforma constitucional.
El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ya dijo en tiempo, no con cierta “·aventura”” que empezaría el proceso para formar gobierno «intentándolo con Ciudadanos», «Ha habido tiempo para hablar de mesas, de sillas, pero no ha habido tiempo para hablar de la gente y de sus problemas, y eso ya no se entiende», ha considerado Vara en una entrevista en la Cadena Ser, A él le daba igual “ocho que ochenta” por eso decía que había que ponerse a escribir negro sobre blanco qué pensamos hacer para resolver los problemas, en algunos casos graves, que tiene este país», y a partir de ahí, señalaba que le «es indiferente» por dónde empezar, pero «lo que sí está claro es que hay que intentar buscar una solución que no sea una repetición de elecciones»., que a él seguramente no le interesa.
El presidente Rajoy ofreció su propuesta, que podría materializarse de distintas formas posibles, con el PSOE y Ciudadanos dentro o fuera del Ejecutivo. «Ese pacto es el bueno si queremos respetar la voluntad de la gente. Es el pacto que le interesa a España», arguyó Rajoy, haciendo hincapié en las repercusiones económicas de una mala decisión. Además, volvió a reiterar que «podría tener su traslación» en comunidades y ayuntamientos donde los socialistas se echaron en brazos de Podemos y sus marcas. «Crearía un estupendo clima para estabilizar las instituciones».
. Al cabo del tiempo ya se ha visto cuales eran los intereses del socialista Pedro Sánchez que al parecer ha convencido al líder de Ciudadanos Rivera para que acuerde con él, siendo de destacar la perplejidad producida por la actitud del líder de Ciudadanos en ese compromiso.
No quiero terminar este artículo sin expresar mi opinión al tema de la desaparición de las Diputaciones, a ello me referiré con más detenimiento, pero eso sería un error muy perjudicial para los municipios de menos de 20.000 habitantes.
