El Ayuntamiento de Guadiana del Caudillo (Badajoz) ha presentado una segunda querella contra el presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, por presunta prevaricación al «retirar las subvenciones al municipio que incumpla, según su criterio, la Ley de Memoria Histórica».
En concreto, el motivo de la presentación de esta querella, es la aprobación, mediante decreto del Presidente, de las bases de diversas subvenciones, donde «se concretan las amenazas y coacciones, vertidas en medios de comunicación» de «retirar» estas subvenciones.
Según informa el Ayuntamiento de Guadiana del Caudillo en nota de prensa, el motivo de esta segunda querella es que «parece evidente» que el presidente de la Diputación de Badajoz, en un «ejercicio arbitrario del poder ha cometido un presunto delito de prevaricación».
A juicio del consistorio, Gallardo ha iniciado «una actuación al margen de la Ley, absolutamente prevaricante y chantajista, frente a quien se oponía a sus designios historicidas», ya que según señala, «no cabe escudarse en que la Ley de Memoria Histórica, en su interesada interpretación, le faculta para imponer, al margen de la justicia, a quien se le deben entregar las subvenciones y a quien no».
Esta nueva «querella criminal» viene a ampliar la que el Ayuntamiento de Guadiana del Caudillo presentó en octubre de 2016 contra Gallardo por presuntos delitos de amenazas y coacciones «por haber inferido contra Guadiana del Caudillo, la nítida expresión de su voluntad de quitarles subvenciones, por no cumplir, según él, con la Ley de Memoria Histórica».
Explica el consistorio que esta primera querella fue inadmitida por el Juzgado de Instrucción nº 2 de Badajoz, mediante Auto de 28 de Noviembre de 2016, un auto contra el que Guadiana del Caudillo presentó un recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Badajoz «reclamando su Nulidad, por ausencia de motivación».
Tras la presentación de este recurso, la Audiencia Provincial resolvió el pasado 6 de febrero, acordar la nulidad de la resolución del Juzgado de Instrucción nº 2, y «ordenando a éste, el dictado de una nueva, con libertad de criterio y arreglo a derecho, que se halle suficientemente motivada», explica el ayuntamiento.
Por tanto, esta primera querella «permanece viva» a la que el Ayuntamiento de Guadilla del Caudilla ha añadido otra, esta vez por un presunto delito de prevaricación.
