La Guardia Civil ha llevado a cabo una investigación sobre un hombre de 58 años que condujo al menos 12,5 kilómetros en sentido contrario por la autovía A-5, cerca de Navalmoral de la Mata, bajo los efectos del alcohol.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 23:00 horas del 5 de mayo, cuando varios usuarios alertaron al 112 sobre un vehículo que circulaba en dirección Madrid, pero por los carriles destinados a la circulación hacia Badajoz. Los agentes lograron localizar al conductor entre Navalmoral y Peraleda de la Mata. Mientras alertaban al resto de los usuarios de la vía, intentaron detener al conductor, quien hizo caso omiso de las señales.
Finalmente, en el kilómetro 177 de la autovía, lograron detenerlo y trasladarlo con seguridad fuera de la vía, evitando cualquier peligro para él y los demás usuarios. Durante este tiempo, había circulado en sentido contrario, superando hasta cuatro salidas y accesos a la vía sin salirse de ella.
Los agentes del Equipo de Investigación de Seguridad Vial de Plasencia (Cáceres) realizaron las pruebas de alcoholemia al conductor, que arrojaron un resultado positivo. Se le han instruido diligencias penales por dos delitos contra la seguridad vial: uno por conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas y otro por conducción temeraria al circular en sentido contrario.
Las diligencias se han remitido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción en funciones de Guardia de Navalmoral de la Mata.
La colaboración ciudadana fue crucial en este caso, ya que las llamadas de varios usuarios alertaron a los servicios de emergencia sobre la presencia del vehículo circulando en sentido contrario. Cuando ocurre una situación similar, se activa un protocolo que incluye la detección a través de cámaras de la DGT o por avistamiento de patrullas o usuarios.
Es importante que los conductores que hayan sobrepasado al vehículo en sentido contrario se pongan en contacto con la Guardia Civil a través del teléfono 062 o el número de emergencias 112, proporcionando la mayor cantidad de información posible.
Una vez confirmada la ubicación del vehículo en contra dirección, se realiza un seguimiento con la participación de las patrullas de la Guardia Civil y la activación de paneles alfanuméricos para advertir a otros conductores del peligro. Los agentes también pueden detener la circulación para cerrar al infractor. Posteriormente, se hace girar al vehículo en sentido correcto y se busca la primera salida para llevar a cabo las diligencias y pruebas de alcohol y drogas pertinentes.
