EL AUGE EN EL ARTE DE MARIALVA

Nos encontramos en los años más complejos y difíciles para el sector taurino. La crisis por lo tanto pasa factura, la mayoría de los rejoneadores han visto reducida sus actuaciones. No obstante, esto no es óbice para que el arte de “Marialva”, es decir, el rejoneo o el toreo a caballo, se encuentre en su época dorada. Está de moda o mejor dicho, en auge.

    El número de jinetes buenísimos, con una técnica depurada, valor, afición, oficio, doma, quiebros, cercanía, toreo y espectáculo, es mayor que en épocas anteriores.

    La afición por los caballos es grande, el rejoneo está metiendo a muchos jóvenes en las plazas y, esto es muy bueno para la fiesta, lo mismo sucede al oficio de guarnicioneros, está tomando un esplendor perdido hace unos años.

    Para mí, las corridas de rejones son actualmente la tabla de salvación de las empresas que organizan sus ferias con la inclusión de este tipo de festejos.

    En el libro sobre la historia del rejoneo podemos estudiar tres períodos, a saber: el antiguo donde destacaron: Cañero, Veiga, Mestre, Joao Nuncio. La edad media o de transición, en la misma destacan los centauros:Conchita Citróen, Bohórquez, los extremeños, hermanos Gregorio y Manuel Moreno Pidal, Domecq, Vidrié, el malogrado Ginés Cartagena, el portugués Lupi, Joao Moura, y Leonardo Hernández (padre).

  Ya en la etapa moderna nos encontramos como es natural a Pablo Hermoso de Mendoza, tal vez, la más grande figura del toreo a caballo de la historia. El de Tafalla, está por encima del bien y del mal, un maestro consagrado del rejoneo, donde lo ha conseguido todo a nivel profesional y al que ha dotado de mayor seriedad y organización, favoreciendo al resto de sus compañeros. No olvidemos al luso-sevillano Diego Ventura, gran rejoneador, espejo de las nuevas generaciones, con una monta sobria. Ginés Cartagena, va para figura. Rui Fernández, muy pulcro. Moura Caetano, así como Noelia Mota, Joao Moura (hijo), Galán , Dominguez y Armendáriz.

    Dentro de los rejoneadores extremeños, destaca sobre todos Leonardo Hernández (hijo) hoy, situado en la élite del rejoneo, en base a una monta espectacular que conecta rápidamente  con los tendidos pero que tiene de base una importante doma, Según el veterinario D. José Antonio Gutiérrez, sus caballos tienen: valor, que en la tecnología del caballo significa corazón, fuerza igual a edad y buena boca, doma de su jinete